Maestro del fin de los tiempos: Capítulo 955

La Langosta del Vacío Kaiser

La actitud altiva de Bai Li antes también había enojado a Viena. No obstante, mantuvo la calma y ocultó su naturaleza fría y degradante.

“Bueno, si no quieres huir ahora, tampoco hay nada que pueda hacer.”

Bai Li sonrió antes de que el cristal en su mano emitiera un destello de rayo plateado. En un instante, el rayo plateado había alcanzado a la Langosta del Vacío Kaiser.

Señor del Oeste y los demás se sorprendieron al ver esto. ¡No se les ocurrió que Bai Li pudiera usar runas espaciales! Las runas espaciales eran bastante raras; de hecho, hasta este momento de la historia, ningún humano había encontrado los medios para localizar también una fuente para estas runas. Por otro lado, había muchas ultra bestias que podían usar las runas—especialmente las bestias espaciales.

Después de aterrizar en la Langosta del Vacío Kaiser, el rayo plateado salpicó para formar ondas plateadas en el aire, aparentemente dejando a la bestia ilesa.

“¡Todavía no sirve de nada!” Señor del Oeste abrió la boca y quiso seguir menospreciando a los mocosos que tenía delante.

Sin embargo, antes de que pudiera continuar, Qin Feng ya se había lanzado hacia la Langosta del Vacío Kaiser.

Por supuesto, no podría soportar el ataque de la Langosta del Vacío Kaiser. El Kaiser era una deidad bestia de nivel S, mientras que el cuerpo de Qin Feng era tan fuerte como una deidad bestia de nivel A.

Sin embargo, Qin Feng tenía energía interna de rango S, los nueve satelites completos.

“¡Asimilación de Asteroides! ¡Nueve estrellas!

“¡Miles Desgarro de Cadena Espiritual!”

¡Fusionando su energía interna en su Sable Emperador Verde, Qin Feng desató todos los espíritus que habían sido absorbidos de las olas de las bestias antes de una sola vez! ¡En este momento, había un millón de bestias saliendo de su sable! Se podían escuchar los aullidos de un millón de espíritus bestiales resonando en la naturaleza, asustando a los civiles de la zona hasta lo más profundo de sus almas.

Las Langostas del Vacío que volaban sin rumbo fijo de repente dejaron escapar un chillido ensordecedor.

Luego, una enorme ruptura espacial se abrió en el cielo, permitiendo que se filtrara una oleada de energía antes de cerrarse nuevamente.

Les tomó unos segundos a los niveles S darse cuenta de que quien cerró y selló la ruptura espacial fue Bai Li, la chica vestida de blanco.

Y el Miles Desgarro de Cadena Esíritual de Qin Feng había aterrizado en el cuerpo de la Langosta del Vacío Kaiser. El Kaiser inmediatamente dio un salto hacia atrás mientras su cuerpo comenzaba a transformarse en una capa negra. Esta era una señal de que estaba entrando al vacío y, si tenía éxito, el ataque de Qin Feng sería en vano.

De repente, todos pudieron sentir un par de garras invisibles arremetiendo y agarrando a la Langosta del Vacío Kaiser, agarrándolo con fuerza fuera de la entrada del vacío. Fue entonces cuando se desató otro de los ataques de Qin Feng.

Al ver que no tenía forma de evadir el ataque, la Langosta del Vacío Kaiser se enfureció y dejó escapar un grito furioso antes de embestir directamente contra Miles Desgarro de Cadena Espiritual de Qin Feng. En un instante, la Langosta del Vacío Kaiser fue capaz de aplastar a los espíritus en pedazos.

Hubo más de miles de espíritus bestiales en ese ataque. Los espíritus que fueron aplastados eran en su mayoría espíritus de bajo nivel. Hubo varios espíritus más resistentes que sobrevivieron al ataque de la Langosta del Vacío Kaiser—estos eran principalmente los espíritus de reyes bestia, emperadores y deidades.

Había más de miles de estos espíritus en el ataque que desató Qin Feng. Ahora habían rodeado a la Langosta del Vacío Kaiser, embistiendo con violencia su caparazón.

Estos espíritus no eran solo “espíritus”—también eran cortes desatados por Desgarro de Cadena Espiritual.

Cuando estos espíritus hicieron contacto con el caparazón, se convirtieron en poderosos cortes y lo cortaron a la fuerza, dejando agujeros y cortes profundos. De las docenas de espíritus poderosos, dos espíritus lobo fueron los más crueles—dejaron un enorme agujero en el caparazón del káiser.

La Langosta del Vacío Kaiser dejó escapar un grito insoportable, mostrando que el ataque de Qin Feng de hecho había dañado a la criatura—la criatura a la que era imposible atacar antes.

Señor del Oeste y los demás habían intentado atacarlo durante dos días pero no pudieron dejarle ni una abolladura. Y, sin embargo, Qin Feng no solo pudo detenerlo en seco sino también dañarlo.

Sin embargo, debido a que estaba herido, la Langosta del Vacío Kaiser se enfureció. Miró a los humanos que tenía delante mientras el espacio a su alrededor comenzaba a distorsionarse, intercalándolos como dos enormes muros envolventes.

Incapaces de soportar la presión extrema del ataque espacial, los niveles S saltaron y retrocedieron inmediatamente.

Mientras tanto, Qin Feng, que estaba en medio de la batalla, parecía no verse afectado en absoluto cuando varios rayos de luz plateada brillaban a su alrededor—Bai Li lo estaba ayudando a defenderse de los ataques espaciales con sus habilidades.

Luego, Qin Feng continuó desatando su Miles Desgarro de Cadena Espiritual, obligando a la Langosta del Vacío Kaiser a continuar retirándose. Después de todo, todavía era una criatura perteneciente al tipo insectoide. Los insectoides solían ser más débiles en comparación individualmente con otras bestias. Por lo general, podían sobrevivir y derrotar a los enemigos con su gran número, no con el poder de un insectoide.

La Langosta del Vacío Kaiser era realmente poderosa. Sin embargo, todavía no era rival para Bai Li.

Podría parecer que fue Qin Feng quien lanzó los ataques que obligaron a la Langosta del Vacío Kaiser a retroceder. Sin embargo, en verdad, Bai Li fue quien había estado negando los ataques del insectoide, dejándolo impotente.

El problema era que las habilidades de Bai Li también debilitarían el ataque de Qin Feng. Por lo tanto, para hacer frente al daño que Qin Feng estaba haciendo en este momento, se necesitaría una gran cantidad de energía interna para hacerlo. Afortunadamente para él, tenía una gran cantidad de suministro de energía interna—los nueve satelites.

Después de luchar durante tres horas, el cielo comenzó a oscurecerse a medida que la noche invadía lentamente. La presencia de Qin Feng se estaba volviendo cada vez más frecuente y, sin embargo, difícil de identificar. Cuando finalmente cayó la noche, el Desplazamiento Fantasma de Qin Feng hizo imposible que la Langosta del Vacío Kaiser lo localizara.

En este momento, la Langosta del Vacío Kaiser resultó gravemente herida. Su sangre plateada goteó sobre el suelo una y otra vez, que luego se solidificó y se convirtió en piedras espaciales.

Si las cosas continuaran así por un tiempo más, la Langosta del Vacío Kaiser definitivamente perecería pronto.

Sabiendo exactamente lo que pasaría si se quedara y luchara, la Langosta del Vacío Kaiser reflexionó por un momento antes de darse la vuelta para huir.

“¡Sello Espacial!”

Bai Li desató su habilidad, con la intención de evitar que el insecto se fuera.

Sin embargo, esta vez, la Langosta del Vacío Kaiser estaba decidida ha retirarse de la escena. Golpeó su cabeza directamente contra la barrera espacial que Bai Li había formado, lastimándose la cabeza mientras aplastaba el Sello Espacial.

Luego, sin dudarlo, la Langosta del Vacío Kaiser activó rápidamente sus runas espaciales, parpadeando varias veces y enviándose a miles de metros de distancia.

Bai Li había usado el mismo truco antes para llevarla a ella y a Qin Feng a viajar una gran distancia. Sin embargo, era bastante difícil usar una habilidad de viaje rápido en medio del combate. Alcanzar al insectoide a la misma velocidad sería imposible para cualquier usuario de habilidad común.

Los niveles S se sorprendieron al ver esto.

“¡No podemos dejarlo escapar!”

“¡Rápido! ¡Tenemos que ponernos al día!”

Los niveles S estaban ansiosos porque querían perseguirlos. Qin Feng, sin embargo, había dejado de moverse.

“No hay necesidad de perseguirlo.” Qin Feng impidió que Bai Li activara su habilidad de teletransportación.

“¡¿Por qué no lo persigues?! ¡Estuviste tan cerca de matarlo!” Preguntó Oplan.

“¿Por qué no lo haces entonces? Tu rayo es bastante rápido. Quizás si lo persigues ahora, podrías robar la presa.” Dijo Qin Feng.

Si una bestia espacial huyera, no habría nadie que pudiera alcanzarla. Por lo tanto, en lugar de perseguirlo, era mejor esperar a que reapareciera y luego acabar con él.

“¡Tú! ¿Cómo puedes ser tan imprudente? ¡No podemos permitir que esta criatura ande sin control! ¿Quién sabe a cuántos humanos matará si no estemos mirando?” Viena habló con desprecio.

“Siempre puedes explorar los alrededores para encontrarlo. Pero esta vez, será mejor que me contactes de inmediato para que podamos matarla. A menos que todavía pienses que yo, un nivel A, sigo siendo alguien inútil en esta pelea. Si ese es el caso, me ahorraría el aliento y no me molestaría en buscarlo si fuera tú.” Qin Feng dijo a los niveles S antes de asentir con la cabeza a Bai Li.

Al ver esto, Bai Li abrió un túnel espacial y teletransportó a ambos.

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