Buenas chicos, les traigo cap c:  espero lo disfruten~ cualquier cosita me avisan.

~ Tortura ~

“Parece que cada vez que tengo suerte nada puede detenerme…… hahahaha, ¡Soy el rey de la suerte!”

Fei se sacó la pesada armadura de metal que apenas se sostenía sobre su cuerpo mostrando la armadura del bárbaro que tenía debajo. Las flechas penetrantes fueron muy efectivas e incluso dejaron muchas abolladuras en su 【Pieles Árticas】. De hecho, la fuerza de las flechas cayendo y atravesando la armadura había dañado el cuerpo de Fei.

“¡… Fingir tu propia muerte es bastante práctico!”

Fei sacó una 【Poción normal de curación】 de su cinturón y tomó un sorbo. Sus heridas se recuperaron con velocidad y el dolor que se había arraigado profundo en sus huesos desapareció. Él no se atrevió a beber toda la botella; todavía quedaba al menos un sexto de la botella cuando la puso de vuelta en su cinturón.

Tras recuperarse, Fei comenzó a observar la oscura y negra tienda. El aire tenía un hedor asqueroso, como si el cadáver de numerosas criaturas hubiese estado pudriéndose y fermentando en el lugar. Bajo la luz parpadeante de las llamas azules, todo se sentía silencioso y horrible.

Los ojos de Fei finalmente cayeron en un par de túnicas negras. Sus ojos brillaron con una idea que se le vino a la mente. Él decidió atar al mago inconsciente. Fei no quería matar al pobre mago; en sus ojos, un mago vivo de cuatro estrellas era mucho más valioso que un cadáver. Además, mientras el mago estuviera bajo su control, cualquier tipo de información presente en el cerebro del mago era un tesoro. Chambord solo era un reino en un área remota dentro del continente. Pues había muchas cosas del continente de Azeroth que Brook ni Lampard podían explicar. Fei quería conseguir información directamente de la boca del mago.

Fei agarró las cuerdas y comenzó a reírse malvadamente, “¡Hahahaha! ¿Cómo debería atar a este viejo bastardo?”

Atar prisioneros en realidad era un trabajo altamente técnico. Si no estaban atados como correspondía, el prisionero podía fácilmente soltarse y escapar, pero debido a la pericia de Fei que consiguió tras ver muchas películas S&M +18, hacer esto no era un problema en lo absoluto.

Tras unos minutos.

“Phew, ¡Por fin!” Fei aplaudió sus manos y miró su ‘proyecto’.

El pobre mago de cuatro estrellas estaba atado como un bollo de arroz human. Fei había utilizado seis cuerdas y demostró más de doce formas distintas de atar un nudo. Él hizo un enorme nudo cuando la cuerda estaba pasando por la cara del mago y luego se la metió por la boca. De esa forma, aunque el mago despertase después, él no iba a poder usar ningún hechizo.

Obviamente eso no era todo.

Fei era una persona bastante cuidadosa. Para garantizar su seguridad, él encontró un palo corto y grueso de madera y sin vergüenza y misericordia se lo metió por el trasero al mago. Luego de eso, él conectó el palo y la cuerda; de esta forma, si el mago luchaba aunque fuera un poco, la cuerda iba a mover el paso y eso iba a hacer que él se auto-violara continuamente. Ese dolor podía causar que hasta el hombre más fuerte se desmayara.

Incluso después de eso, Fei todavía no se sentía lo suficientemente seguro. Un mago de cuatro estrellas era demasiado poderoso para él de todas formas. ¿Qué iba a hacer si el hombre tenía alguna forma de desatar las cuerdas? …… tras pensar un poco, Fei le rompió los huesos y extremidades al mago. Tras ver como el mago inconsciente comenzaba a agitarse de forma agresiva y un montón de sangre y espuma había comenzado a salir por su boca, Fei supo que el mago no se iba a despertar pronto por lo que inició su plan con una cara de desdén en el rostro.

……

……

En la base del enemigo.

El resto de los soldados estaban empacando sus cosas y estaban alistándose para retirarse rápidamente. Hace diez minutos, un explorador se apresuró en regresar para reportar que el equipo de reconocimiento había descubierto los rastros de las tropas del Imperio Zenit. Estaba casi dado por hecho que venían avanzando hacia Chambord. Esto forzó al caballero de la máscara plateada a rendirse con el asedio contra el castillo de Chambord– El caballero enmascarado sabía que los refuerzos del Imperio Zenit eran una buena excusa para retirarse. Después de que el puente  colapsara, ya no había forma en la que su ejército puede conquistar el castillo de Chambord.

Además de eso, casi ningún soldado estaba dispuesto a luchar cerca del castillo ahora. Lo que había ocurrido el día de hoy había destruido el coraje de los soldados de élite, todo lo que querían ahora era irse y dejar esta tierra maldita y no volver a ver aquel castillo que se encontraba pasando el puente nunca en sus vidas.

Todos en la base se estaban apresurando en lo que recolectaban sus cosas, haciendo que el campamento se viera muy caótico. Afuera de la tienda del mago se encontraban dos soldados enemigos. Estos eran los guardias que el caballero de máscara plateada le había regalado a su maestro. Ambos se encontraban parados altos y fuertes; pues tenían miedo de que si holgazaneaban, el mago se iba a dar cuenta. Hace un tiempo, catorce soldados habían sido tomados por el mago como ratas de laboratorio por esa misma razón. Las almas de aquellos catorce habían definitivamente sufrido una tortura inimaginable antes de morir. Ellos gritaron y sollozaron como si fueran criaturas salvajes, causando que todos los soldados en la base tuvieran pesadillas.

Ambos deseaban que el asedio acabase pronto. Una vez que las tropas se retiraran, no iban a tener que proteger la tienda de este mago endemoniado por más tiempo.

En ese momento –

“Hula –”

La gruesa cortina que cubría la entrada de la tienda se abrió y alguien dio un paso afuera.

Ambos guardias rápidamente se dieron media vuelta para poder hacer una reverencia y saludar, sin embargo, lo que ellos vieron fue la cara del hombre que acababa de salir. Sus caras inmediatamente se volvieron pálidas y lo único que sintieron fue el frío; sus bocas comenzaron a mascullar y sus dientes a castañear en lo que hacían una serie de sonidos quebradizos. Sus lenguas casi se les cayeron en lo que no podían decir palabra alguna.

“¡Plop!”

Tras unos segundos de puro temblar, los ojos de uno de los soldados se volvieron totalmente blancos y luego se desmayó por la sorpresa. El otro soldado estaba un poco mejor, pero su cuerpo estaba también temblando como si estuviese tratando de sacarse los piojos de encima. Él apunto su dedo como si hubiese visto un fantasma y luego su mente se quedó totalmente en blanco. Él estaba un poco envidioso de su colega recién desmayado; pues ahora no sabía qué hacer y tenía que enfrentar al demonio semi-consciente.

“Oye amigo, estoy perdido. ¿En qué tienda vive tu jefe?” Fei tenía miedo de que el soldado en frente de él también se fuera a desmayar. Él puso una sonrisa que él consideraba amigable y brillante y le preguntó al soldado con su voz más sincera en lo que apoyaba su mano en el hombro del soldado.

El soldado estaba temblando incontrolablemente y no podía decir palabra alguna. Él tembló en lo que lentamente apuntaba con su dedo a una tienda negra muy grande que se encontraba a unos cincuenta metros del lugar, y luego “¡Plop!” desmayado como lo había deseado.

“¡Pooh!”

Fei miró a la tienda que se encontraba un poco más lejos y escupió en el piso. Aunque los soldados enemigos se encontraban en todos lados, él ni si quiera intentó esconderse; él caminó directamente hacia la tienda. Tras hacerse cargo del mago de cuatro estrellas, ningún enemigo podía detenerle.

Tras un par de segundos, alguien finalmente se dio cuenta de Fei quien estaba avanzando sin detenerse. Sin embargo, nadie gritó ni dijo sonido alguno.

“¡Ding! ¡Ding!”

En toda la base, casi todos los soldados que habían visto a Fei comenzaron a temblar en pavor mientras que sus rostros se volvían cada vez más pálidos. No podían sostener sus armas a estas alturas, causando que estas cayeran al piso una tras otra. Como si hubiesen sido petrificados por un hechizo mágico, ninguno de ellos se movió. Todos estaban bailando el baile del ‘temblorcito’ en unísono en lo que veían a Fei caminar hacia la gran tienda negra que se encontraba en el medio de la base.

El lugar se encontraba silencioso y la atmósfera era rara.

……

……

En el mundo de defensa de Chambord.

“Oh Dios……”

“Imposible……”

“Rey Alexander……”

Tras ver las flechas perforadoras cubrir todo el puente colapsado, muchas personas comenzaron a llorar instantáneamente. Sus lágrimas hicieron que sus rostros terminaran completamente húmedos y tuvieron que sostenerse los unos a los otros para poder mantenerse en pie, era como si la estamina de todos hubiese sido succionada por completo. Lampard no dijo palabra alguna; él solo saltó del mundo de defensa. Emma desmayada en los brazos de Ángela, mientras que el rostro de la misma Ángela se encontraba pálido como la nieve.

El sol en el cielo de repente había perdido todo su resplandor.

Todos en el muro de defensa sintieron como si el mundo se hubiese vuelto oscuro de repente, como si algo magnifico hubiese colapsado de repente.

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