Súper Gen Divino – Capítulo 74: Licencia del Pabellón Santo de Clase S

Tercer y ultimo capítulo de la semana.

¡Disfrutenlo!

Sorprendido, Han Sen miró a Qin Xuan. Ella sonrió y dijo: “Escúchame, matriculate en Blackhawk. Si consigues ser admitido, te garantizo que Shen Tianzi no se atreverá a tocar a tu familia.

“¿Cómo puedes garantizar eso?” Han Sen la miró fijamente.

“Cada vez que luchábamos, grababa y observaba tus datos de combate. Podría decirte con seguridad que tienes el talento para ser un gran francotirador o arquero. Tu ritmo y la predicción de tu oponente son excepcionales.” Dijo Qin Xuan.

Han Sen no habló. Estas palabras de alabanza no eran lo que él quería oír.

“En el ejército, además de ser la jefa de estación, también soy la responsable de organizar un escuadrón especial. Creo que eres alguien que necesito. Mientras tu te unas a la brigada, tu familia podrá obtener la protección de los militares. Puedo asegurarte con certeza que si te conviertes en miembro del escuadrón, Shen Tianzi no podrá usar ningún medio ilegal para herir a tu familia.” Dijo Qin Xuan. “Sin embargo, el requisito es que seas admitido en Blackhawk. Sólo entonces podré nominarte para formar parte del equipo.”

Han Sen no contestó inmediatamente a Qin Xuan, pero reflexionó durante un momento. Él la miró y le preguntó: “¿Sería posible que me informes de cuál e la naturaleza de este equipo?”

“No.” Qin Xuan contestó sin la menor vacilación.

“Dame algo de tiempo. Necesito pensarlo.” Respondió Han Sen.

“Claro, todavía tengo tiempo. Piénsalo.” Qin Xuan sonrió y parecía muy confiada.

Han Sen dejó la estación de teletransporte, regresó a casa y descansó por un día. Regresó a El Santuario de Dios a la tarde siguiente.

Han Sen dio varias vueltas deliberadamente alrededor del Refugio Armadura de Acero antes de ponerse su armadura divina y entró al refugio, atrayendo la atención de mucha gente.

“Wow, ese es el mismísimo Dollar…”

“Ja, ja, Dollar hizo su aparición…”

“Dollar mi ángel está aquí…”

“Entre toda la gente de la primera zona de El Santuario de Dios, sólo Dollar es mi ídolo.”

Todos en el Refugio Armadura de Acero quedaron impactados. Aunque todo el mundo conocía que Dollar era de allí, estaban gratamente sorprendidos de ver a Dollar haciendo su aparición.

Han Sen no habló, pero caminó hacia la arena de combate. Pronto, detrás de él se reunió mucha gente. Algunos que ya habían participado en el concurso regresaron al estadio siguiendo a Han Sen. Todos querían ver a Dollar peleando en persona.

La ronda preliminar estaba casi terminada y sólo había unas pocas personas en las gradas. Sin embargo, la estadio se volvió a llenar poco después de la llegada de Han Sen.

Han Sen revisó la pantalla y había dos grupos más antes que él. Entonces encontró un asiento delantero para sentarse.

No tardó mucho en llegar Shen Tianzi, Shi Quange y Qin Xuan. Estando tan cerca de Han Sen, Shen Tianzi lo habría matado si estuvieran solos.

“Dollar, ¿podemos hablar?” Qin Xuan se acercó a Han Sen y preguntó.

“¿Qué pasa?” Contestó Han Sen con voz ronca.

“Quiero invitarte a unirte al Grupo de la Armadura de Acero y puedes pedir cualquier condición.” Dijo Qin Xuan.

Yang Manli dijo: “Si estás dispuesto a unirte a Diana, te cederé el puesto de líder del equipo. Serías un arquero perfecto.”

“Lo siento, no estoy interesado en unirme al Grupo de la Armadura de Acero o ser arquero.” Contestó Han Sen.

“Dollar, creo que deberíamos hablar de negocios. Si tuvieras espíritus de las bestias o carne de criaturas mutantes o divinas, con gusto pagaría por ellas. Por ejemplo, el espíritu de la bestia cazador sanguinario.” Shi Quange también se acercó a Han Sen.

“Tengo algo de carne de criatura mutante para vender.” Le dijo Han Sen a Shi Quange.

Los ojos de Shi Quange se iluminaron, “¿Qué criaturas? ¿Cuántas?

“Un avispón mutante. La carne está limpia. Tengo entre 20 y 30 avispones.” Dijo Han Sen con indiferencia, pero la gente que le rodeaba estaba conmocionada.

“¿20 a 30? No destruiste un nido entero de avispas mutantes, ¿verdad? ¿Dónde los encontraste?” Preguntó apresuradamente Shi Quange.

“No te importa de dónde los saqué. Sólo dime si estás interesado.” Dijo Han Sen.

“Sí, claro que me interesa. Si realmente los tienes, dame una cifra y me los llevaré todos.” Shi Quange dijo rápidamente.

“Shi Quange, ¿a qué te refieres con “tomarlos todos”? ¿Crees que Qin Xuan y yo estamos muertos?” Shen Tianzi frunció el ceño y dijo a Han Sen: “Un millón cada uno. Compraré todos los que tengas.”

“¿Un millón? Shen Tianzi, no desprecies a los demás. Ofrezco 1,2 millones pos cada uno.” Gritó Shi Quange.

Shen Tianzi miró fijamente a Shi Quange, “1,5 millones. ¿Crees que podrías seguirme el ritmo?

“Ser rico no significa que estés dispuesto a pujar, 1,6 millones.” Contestó Shi Quange, para no ser superado.

“No sigáis pujando. No tengo la intención de venderlos por separado, ni los cambiaré por dinero.” Dijo Han Sen.

“Di tu precio.” Aunque Shen Tianzi quería matar a Han Sen ahora mismo, viendo una gran cantidad de carne de criatura mutante de avispones raros, no dejaría que otros se le adelantaran.

“Quiero cambiar estas criaturas mutantes por una licencia de Clase S por Saint Hall.” dijo Han Sen en voz baja.

Al escuchar las palabras de Han Sen, tanto Shen Tianzi como Shi Quange parecían reacios.

El Pabellón Santo era una institución de investigación de artes marciales. La mayoría de las artes hipergénicas populares fueron desarrolladas por el Pabellón Santo.

El Pabellón Santo también vendía algunas artes hipergénicas avanzadas, pero había restricciones en la compra, especialmente para las artes hipergénicas más avanzadas de la Clase S. La gente común no era elegible para comprarlas aunque tuvieran dinero. Han Sen quería comprar un arte hipergénico avanzado para que su madre y su hermana lo practicaran, ya que no se atrevía a mostrar a Músculo de Hielo y Hueso de Jade a nadie antes de saber de dónde venía este arte hipergénico.

“Tu precio es demasiado alto. Compraré todas tus criaturas mutantes a dos millones cada una. Además, dejaré de lado nuestros agravios anteriores.” dijo Shen Tianzi, mirando a Han Sen.

“Lo siento, no quiero nada más que una licencia del Pabellón Santo de Clase S. Puedes pensar en ello.” Han Sen se levantó y subió al escenario. Era el turno de su grupo.

Viendo venir a Han Sen, otros en el grupo se sintieron amargados, ya que sabían que era imposible para ellos pasar la ronda preliminar ahora que Dollar estaba allí.