Sexto Capítulo Semanal
¡Disfrútenlo!
La habilidad con la espada llamada Que Yi se centraba en sacrificarse para complementar el ataque de otras personas. Los trece evolucionados eran de diferentes refugios y no tuvieron mucho tiempo para practicar su colaboración. Sin embargo, con Ning Yue presente, estaban conectados en una máquina de matar. Incluso Han Sen no podía encontrar ninguna grieta.
Ning Yue parecía extremadamente calmado. Todos sus movimientos parecían fáciles pero seguían unas reglas increíbles. Aunque sus ataques no eran ofensivos, lograba convertir los movimientos de los otros trece evolucionados en una parte de sí mismo, obligando a Han Sen a entrar en las viñas.
Ning Yue no quería matar a Han Sen en primer lugar. Sólo quería ver por sí mismo la lucha entre Han Sen y esa criatura increíblemente fuerte. O Han Sen mataba a la criatura o era asesinado, sus dudas serían respondidas.
“Joven amo, ¿realmente tenemos que luchar contra esto?” Preguntó Han Sen mientras se retiraba, ya que entendía las intenciones de Ning Yue.
“Si estuviese solo, me alegraría de ser tu amigo y nunca te haría daño. Sin embargo, ….” Ning Yue comento pero nunca detuvo su espada, forzando a Han Sen a acercarse a las vides.
“Qué lástima. No quería mataros, pero…” Han Sen suspiró y dijo. Estaba diciendo lo que pensaba.
Antes de descubrir la relación entre los Nings y los Hans, Han Sen no quería matarlo. Sin embargo, no le quedó otra opción. Al igual que Ning Yue, Han Sen era el tipo de persona que no tendría piedad una vez decidiera matar.
“¿Matar? ¿Tú? ¿Crees que eres bueno con esa daga afilada? Eso no hace nada. Eres simplemente una bestia atrapada en una jaula. Tu vida y tu muerte dependen de nuestro deseo.” Exclamó Liu Lin con fiereza.
“¿Es eso cierto?” Han Sen frunció sus labios. Viendo las armas que se acercaban a sí mismo, no retrocedió más, sino que apuntó a Liu Lin.
“Retirada.” Ning Yue de repente tuvo un mal presentimiento. Aunque no había forma de que Han Sen pudiese bloquear tantas armas, por alguna razón, Ning Yue sintió peligro.
Cuando las armas estaban a punto de llegar al cuerpo de Han Sen, era demasiado tarde para que Han Sen huyera y para que los evolucionados frenasen sus armas. A pesar de las órdenes de Ning Yue, sus hombres ya no pudieron detenerse.
¡Boom!
Un monstruo gigante con armadura de jade que parecía la cruz entre un escorpión y una abeja apareció de repente junto a Han Sen, deteniendo todas las armas que estaban a punto de golpear a Han Sen.
Las armas divinas usadas por los que evolucionados eran de las mejores en la primera zona de El Santuario de Dios, pero ninguna de ellas pudo herir a ese monstruo. En vez de eso, los evolucionados fueron derribados.
¡Crack!
Un par de garras que parecían la hoz de la parca se cruzaron sobre los hombros de Liu Lin, enviando su cabeza al aire. Los ojos de Liu Lin se abrieron de par en par incluso después de la muerte, llenos de terror.
El feroz Rey Gusano de Roca Dorado mató atravesando el grupo. Sus cuatro alas zumbaban, el Rey Gusano bailaba con sus ocho garras moviéndolas arriba y abajo.
Fue una verdadera matanza. Equipado con la súper armadura de mascota, el Rey Gusano de Roca Dorado ni siquiera parecía algo que perteneciera la primera zona de El Santuario de Dios. Ni siquiera los evolucionados divinos pudieron herirlo. En cambio, dondequiera que se moviese el Rey Gusano, las extremidades caían y la sangre salía a borbotones. Frente a la fuerza absoluta, incluso la habilidad con la espada Que Yi era completamente inútil.
En este punto, el Súper Rey Gusano de Roca Dorado era aún más poderoso que la tortuga. Después de todo, su velocidad y fuerza eran las mismas que las de la tortuga. Y en lo que la tortuga era mejor, la defensa, no era tan poderosa como la armadura para mascota.
Junto con su capacidad de vuelo y sus garras afiladas, era tan fácil para que el Rey Gusano de Roca Dorado matar a los evolucionados divinos, como matar a un perro.
No había ninguna posibilidad de que los evolucionados se retiraran también. El camino que conectaba el valle con el exterior era tan estrecho que sólo podía pasar un hombre a la vez. Además, su velocidad era mucho menor que la del Rey Gusano de Roca Dorado. Cuando el grupo de personas llegó al sendero, la mitad de ellos ya habían sido asesinados por el Súper Rey Gusano de Roca Dorado. Sólo tres hombres llegaron al paso.
Tan duro como Ning Yue, estaba sorprendido al ver a los evolucionados divinos, que el Grupo Starry dedicó mucho tiempo y esfuerzo en cultivar, masacrados de esta manera. Lo que más le afectó fue la existencia del Súper Rey Gusano de Roca Dorado.
“¿Podría ser algo más allá de una mascota divina?” Ning Yue miró al Rey Gusano, que era demasiado grande para entrar en el estrecho sendero con emociones complejas mientras salía del sendero.
Han Sen rápidamente desconvoco a la mascota y entró en el camino él mismo con la daga Lobo Maldito. No había forma de que pudiese dejar que Ning Yue huyese así.
Usando el Mantra de la Herejía y Sobrecarga, la velocidad de Han Sen fue mucho mayor que la de los tres sobrevivientes. Sólo le llevó un momento ponerse a la vera de ellos.
Los dos evolucionados divinos que iban detrás de Ning Yue intentaron defenderse, pero no tenían espacio para esquivar en el estrecho sendero. Además, sus armas fueron partidas por la mitad por la daga Lobo Maldito.
Escuchando dos gritos y viendo la sangre, Ning Yue supo que estaba solo, y Han Sen llego inmediatamente frente a él.
Ning Yue sabía que no había forma de que pudiera salir vivo de allí. Después de todos sus cálculos, no esperaba que Han Sen tuviera una mascota tan aterradora. Ning Yue suspiró y se rindió, permaneciendo quieto y esperando que llegase la muerte.
“Ning Yue, ¿qué hay tan especial en ese valle?” Preguntó Han Sen, con su daga en el cuello de Ning Yue.
“Sólo mátame. No preguntes.” Ning Yue no movió ni un músculo, ni siquiera abrió los ojos.
“No será tan fácil morir.” Dijo Han Sen con calma. De repente, un espíritu de la bestia fue convocado y se lanzo sobre Ning Yue.
La expresión de Ning Yue cambió repentinamente tras escuchar lo que dijo Han Sen. Inmediatamente abrió los ojos y vio en su cara un horrendo espíritu de la bestia de color púrpura oscuro que parecía un caimán.
¡Boom!
El espíritu de la bestia no se detuvo y entró en el cuerpo de Ning Yue. La criatura gigante entro en el pecho de Ning Yue con facilidad.
Ning Yue sintió que todo su cuerpo era apuñalado y empalado, como si alguien estuviese cortando sus músculos. Sin embargo, esa sensación sólo duró un segundo. Poco después, el horrendo espíritu de la bestia salió del cuerpo de Ning Yue y se acurrucó junto a Han Sen, sus espeluznantes ojos fijos en Ning Yue.
El parásito eh , por fin lo usa v:
Gracias por el cap