Súper Gen Divino – Capítulo 272: Esencia Vital

Primer Capítulo Semanal

¡Disfrutenlo!

Han Sen finalmente entendió por qué no podía ni siquiera hacer daño al bebe Rugidor Dorado. Ni siquiera estaban al mismo nivel. Aunque el Rugidor Dorado acababa de nacer, obviamente ya tenía las características de una súper criatura.

“El cristal negro que obtuve de ese escarabajo negro, ¿podría ser también la esencia vital de alguna súper criatura?”

Han Sen pensó en ello y desmonto su propia teoría.

El cristal negro no se derritió como la esencia vital del Rugidor Dorado, de lo contrario era tan pequeño que ya se habría acabado. El cristal negro no cambió nada.

Han Sen no tuvo mucho tiempo para pensar. Sosteniendo la esencia vital, cada vez que sentía que podía comer de nuevo, chupaba el cristal dorado hasta que se llenaba.

Escuchando la voz sonando en su mente una y otra vez, Han Sen creyó que debía ser la cosa más feliz de la vida. Han Sen pensó que su viaje valía la pena en ese momento.

Han Sen tardó más de una semana en terminar toda la esencia vital, y obtuvo diez súper puntos genéticos, lo que sorprendió a Han Sen.

Originalmente, Han Sen pensó que tendría que comerse también toda la súper criatura para conseguir los diez puntos genéticos, lo que no parecía ser el caso. Tal vez para las súper criaturas, los puntos genéticos se concentraban en la esencia vital que contenían.

De hecho, Han Sen regresó a la cuenca, tratando de comer algo de la carne del Rugidor Dorado. Sin embargo, pronto descubrió que, puesto que ni siquiera podía herir al bebé Rugidor Dorado, no tenía forma de consumir el cuerpo del león gigante.

Aunque se sentía desanimado, Han Sen no tenía los métodos adecuados. Tenía que consolarse de que tal vez la carne del Rugidor dorado no haría nada.

“Me pregunto cómo los humanos fueron capaces de matar a la primera criatura divina.” Han Sen estaba reflexionando, pero no llegaba a ninguna conclusión. En El Santuario de Dios, no había internet para que él consultara.

Vacilante se alejó de la isla. Ya que no podía matar al bebé Rugidor Dorado, no debería quedarse más allí. A medida que el Rugidor Dorado crecía más y más rápido, podría acabar muriendo.

Por suerte, Han Sen tenía alas divinas. De lo contrario, ni siquiera podría cruzar el océano.

Con su experiencia siguiendo al Rugidor Dorado, Han Sen aprendió lo grande y complicado que era El Santuario de Dios. Ahora estaba teniendo mucho cuidado dondequiera que iba.

Han Sen pensó que su viaje sobre el océano podría ser muy arriesgado. Después de todo, no podía saber las direcciones en el océano y había muchas bestias marinas. Aunque esas bestias no podían alcanzarlo en el cielo, los pájaros divinos podrían ponerlo en peligro.

Tal vez fue suerte. Han Sen voló durante dos días sin correr ningún peligro, y también mató a un pez mutante, cuya carne contribuyó con dos puntos mutantes. En ese punto, Han Sen tenía ochenta y seis puntos genéticos mutantes.

Por fortuna, Han Sen vio una isla y un gran barco moderno junto a ella.

Aunque no había ningún equipo electrónico visible, Han Sen podía decir por el material del barco que era un producto de alta tecnología. Incluso tenía la inscripción ‘Diosa de la Luna’

Sin embargo, el barco parecía estar gravemente dañado y deteriorado. Debía haber estado allí por mucho tiempo.

Eso no le importaba a Han Sen. Ya que había un barco en la isla, debía haber gente también. Tal vez incluso había un refugio en la isla, lo que sería fantástico. De esa manera, Han Sen podría usar el sistema de teletransporte para volver a la escuela.

Había estado en El Santuario de Dios durante varios meses y no había podido enviar ningún mensaje. Ya debía haber perdido la evaluación semestral. No estaba tan preocupado por la evaluación, pero sabía que Ji Yanran debía estar muy preocupada.

Cuando Han Sen estuvo cerca, ya no se sentía alegre. La isla no era ni grande ni pequeña. Han Sen podía ver toda la isla desde el cielo, pero no veía ningún edificio.

Aterrizando en la isla, Han Sen desconvoco sus espíritus de las bestias y estaba listo para encontrar un lugar donde descansar. De repente, vio a una persona que salía de la selva.

Al ver a Han Sen, esa persona se detuvo, saludó a Han Sen y corrió hacia él.

La existencia de seres humanos hizo que Han Sen se sintiera mejor sobre el lugar. Él creía que esto significaba que el lugar no estaba demasiado lejos de un lugar civilizado.

Aunque los humanos podían teletransportar las partes de los barcos y unirlas en El Santuario de Dios, ninguna nave tenía un sistema energético moderno, ya que no se podía utilizar ninguna tecnología, por lo que todas las naves sólo podían navegar en una pequeña distancia. Además, el océano era un lugar más peligroso que la tierra en El Santuario de Dios, así que nadie se atrevía a ir demasiado lejos con un barco.

Normalmente, se utilizaban barcos para ir a los alrededores y cazar criaturas marinas débiles.

Han Sen observó a la persona, que era una joven de veinte años que llevaba una armadura azul espíritu de la bestia. Miró excitada a Han Sen.

“¿Eres de Isla Frondosa?” Preguntó la joven con voz temblorosa.

“Lo siento. No sé dónde está Isla Frondosa?.” Han Sen agitó la cabeza y quiso preguntarle a la mujer dónde estaba.

En ese momento, unas cuantas personas más salieron de la selva cercana. Todos tenían la misma edad que la mujer.

Estaban igualmente emocionados cuando vieron a Han Sen. Todos le hacían todo tipo de preguntas a Han Sen. Pero la más frecuente era la pregunta de la mujer, “¿Eres de Isla Frondosa?”

“Lo siento. No soy de Isla Frondosa. Vengo del Refugio Armadura de Acero, sufrí un naufragio y terminé aquí. ¿Puedo preguntar dónde estoy?”

Al escuchar la respuesta de Han Sen, esas personas de repente parecían muy decepcionadas.