Súper Gen Divino – Capítulo 116: Admisión

…cuando escucho “Lectum Patrocinium” y una explosión sacudió mi castillo, seguido de muchos ¡Kiaahh! ¡Pow! ¡Plash! ¡Rantanplan!…
Cuando todo quedo en calma de nuevo, otros dos de mis preciosos capítulos habían sido recuperados desaparecido.
Pensáis que me habeis derrotado, pero no, pronto volveréis a caer en mi trampa, Muajajaja, Muajajaja
Segundo, de otros dos, Capítulo Patrocinado.

¡Disfrutenlo!

“Señorita, entonces gané, ¿verdad?” Han Sen se acercó con una sonrisa. Tener una novia tan bonita cuando acaba de entrar en la escuela era algo de lo que estaría muy orgulloso.
“Usaste un dispositivo para hacer trampas, así que no cuenta.” Dijo Ji Yanran enojada.
“¿Dispositivo para hacer trampas?” Han Sen estaba un poco conmocionado.
“Deja de fingir. Bloqueaste todos mis puntos y todo parece falsificado. Si no fuera por un dispositivo para hacer trampas, ¿cómo podrías haberlo hecho?” Ji Yanran comento mientras hacia pucheros. Su mirada parecía decir, “Ya he visto lo despreciable que eres.”
“Desconozco lo que es un dispositivo para hacer trampas.” Han Sen extendió sus manos.
“Sigue fingiendo si quieres.” Ji Yanran estaba segura de que Han Sen había hecho trampa.
“Si no me crees, podemos jugar otra partida.” Dijo Han Sen.
“Tienes un dispositivo para hacer trampas, así que el resultado sería el mismo sin importar cuántas veces juguemos.” Ji Yanran frunció sus labios con desdén.
Han Sen se quedó estupefacto y dijo, “Aquí tienes mi comunicador. Puedes comprobarlo tú misma y ver si tengo un dispositivo para hacer trampas instalado.”
“No entiendo cómo funciona ni dónde lo escondes.” Ji Yanran había determinado que Han Sen había hecho trampa y tenía razón. La actuación de Han Sen parecía como si estuviera haciendo trampas.
Su habilidad para predecir y sus reflejos eran tan sobresalientes que incluso Yi Dongmu no era su rival, por no hablar de Ji Yanran.
Han Sen creía que le trataba injustamente, pero Ji Yanran no le creía.
“¿Entonces cómo puedo convencerte de que no hice trampa?” Han Sen extendió sus manos impotente.
“Fácil. Cuando lleguemos a Blackhawk, podríamos tener otro enfrentamiento con el equipo profesional que hay allí, y si aún puedes ganar, creeré que no hiciste trampa y entonces cumplire mi promesa.” Dijo Ji Yanran con confianza. Ella creía que Han Sen debía haber utilizado un dispositivo para hacer trampas que no funcionaría en el equipo profesional. Entonces su argucia quedaría expuesta.
“Muy bien.” Han Sen sonrió y dijo, “¿pero tendrás que decirme cuál es tu nombre?”
“Mi nombre es Ji Yanran, y puedes preguntar a cualquiera que averigüe dónde estoy.” Ji Yanran creía que Han Sen la había engañado y que no sería su rival en absoluto, así que le dijo su verdadero nombre sin dudarlo.
“Lindo nombre.” Han Sen sonrió.
“Bueno, si quieres entrar en la escuela y jugar contra mí, tendrás que ser admitido primero, y un don nadie nunca podrá entrar en Blackhawk.” Pensó Ji Yanran.
Han Sen no la molestó más, regresó a su propio asiento y continuó jugando la versión en linea de ‘La Mano de Dios’.
Sólo jugó contra Ji Yanran porque era divertido y no creía que esto le haría ganar una linda novia, así que realmente no le importaba.
Aunque Ji Yanran era hermosa, Qin Xuan y Yang Manli tampoco estaban mal. Por lo tanto, él no estaba realmente enamorado, sólo pensaba que parecía dulce y era una chica interesante.
Ji Yanran ya no estaba de humor para jugar. Miró fijamente a Han Sen antes de ir a su habitación y descansar un poco.
Mientras seguía jugando, Han Sen se sentía menos aburrido. No volvió a ver a Ji Yanran hasta que desembarcó. Ella tomó su equipaje y se subió a un aerovehículo privado de lujo, lanzándole otra mirada antes de irse.
Han Sen no prestó atención a eso y se registró en el hotel que Qin Xuan le había reservado, esperando a que empezara el examen de ingreso.
Las escuelas militares eran diferentes a las de hacía siglos. En esta época, se podía hacer el examen de ingreso a cualquier escuela militar a la que se quisiera ir. Siempre y cuando alguien aprobase el examen sería admitido.
Con la condición de Han Sen, podría aprobar el examen por su cuenta. Pero con la recomendación de Qin Xuan, podría beneficiarse del programa de inscripción especial y cumplir con estándares más bajos. Sin embargo, en este caso, necesitaba hacerlo mucho mejor en tiro con arco.
Esto no fue nada difícil para Han Sen. Controlando su fuerza para alcanzar el estándar de matriculación especial, además sin destacar en tiro con arco, simplemente cumpliendo con lo minimo.
A pesar de ello, la actuación de Han Sen en tiro con arco seguía estando entre los diez primeros. En esta época, muy pocas personas practicaban el tiro con arco. Aunque los arqueros eran muy apreciados en El Santuario de Dios, en la Alianza cualquier francotirador podía usar un arma moderna para matar a un arquero, a pesar de que era mucho más difícil aprender a disparar con arco.
Además de los soldados especialmente cultivados, muy pocas personas aprenderían tiro con arco por su cuenta y aún menos lo hacían bien.
La razón por la que existía el programa de inscripción especial era que el Departamento de Tiro con Arco de Blackhawk era una de los más débiles de todas las escuelas militares de la Alianza, lo que era una vergüenza para una escuela famosa como Blackhawk. Por eso estaban tratando de reclutar estudiantes arqueros para revitalizar el Departamento de Tiro con Arco.
Fue admitido sin dificultad en Blackhawk como estudiante de ingreso especial, Han Sen pasó por algunos procedimientos y se convirtió en un estudiante de la escuela militar.
Después de informar del resultado a su madre, Han Sen no oyó hablar a Luo Sulan un buen rato. Oyéndola débilmente sollozar.
“Mi hijo fue admitido en una escuela famosa.” Dijo Luo Sulan con lágrimas de felicidad al cabo de un rato.
Han Sen escuchó su voz y sus ojos se humedecieron. Su madre había pasado por mucho estos años.
Después de informar a su madre, Han Sen llamó a Qin Xuan y ella le habló casualmente, “Felicidades. Me he ocupado de los procedimientos para que te unas al equipo. De ahora en adelante, seras uno de mis hombres.”
“Jefa de estación, ¿qué hace el escuadrón?” Preguntó Han Sen con curiosidad.
“Niñeras” Dijo Qin Xuan con voz extraña.
¿Niñera? Han Sen estaba conmocionado y no entendía lo que un escuadrón especial tendría que ver con una enfermera o una niñera.
“Nuestra tarea es hacer de canguros de algunos jóvenes especiales, como Yuan y Qing, a quienes ya has conocido. También son nuestros clientes. Al cuidarlos en El Santuario de Dios, podemos ganar generosas recompensas. Por ejemplo, licencias de clase S del Pabellon Santo, que no puedes comprar, serian el pago si llevas a cabo ciertas misiones.” Qin Xuan le explicó y luego le dijo, “Hay algunas formalidades en las que se necesito tu firma y debes tener en cuenta algunas cosas. Pero vamos te dare los detalles más tarde en el refugio.”
“Mi familia…” Han Sen quería hacer la pregunta más importante.
“El expediente ha sido presentado. Dentro de una semana, tu madre y tu hermana estarán bajo la protección de los militares. A menos que mates al padre de Shen Tianzi o te cases con su esposa, probablemente no estará tan desesperado como para arriesgarse a hacer algo estúpido. Tu familia estará a salvo en la Alianza, cosa de la que puedes estar totalmente seguro.” Se comprometió solemnemente Qin Xuan.
“¿Y si estuviera realmente desesperado?” Preguntó Han Sen de nuevo.
“No se atrevería.” Dijo casualmente Qin Xuan, sonando llena de confianza.