Recompensas y Castigos

Cinco días después, Farrina y Joe recibieron información del enlace del Primer Ejército en el camino.

El comandante en jefe del Ejército, Iron Axe, había solicitado reunirse con ellos.

Después de ir hasta la Montaña de la Jaula, entraron a una sala de conferencias y descubrieron que había más de una persona adentro. Las charreteras sobre sus hombros revelaron que todos eran oficiales de alto rango del Primer Ejército. (NTE: las charreteras son esas hombreras militares que muchas veces dicen el rango de uno, creo que ya lo había explicado en esta novela o quizás en otra.)

Joe tragó saliva con nerviosismo.

Farrina mantuvo la calma y realizó un saludo militar. “El primer equipo de transporte, el segundo miembro del convoy de vehículos, Farrina, está aquí para informar.”

Iron Axe y los demás sonrieron y devolvieron el saludo. Ninguno de ellos actuó engreído.

Esto la sorprendió un poco.

El estilo de la Iglesia de Hermes le inculcó el hábito de ignorar la disparidad jerárquica, lo que la llevó a manejar siempre los asuntos sin rodeos. Nunca esperó que los altos oficiales del ejército de Graycastle hicieran lo mismo, hasta el punto de superar a la Iglesia de Hermes.

La razón de su calma era su conciencia tranquila, pero eso no indicaba que había olvidado que solía ser un ‘chivo expiatorio’ para el Ejército del Juicio—No sería nada extraño si la trataran con frialdad.

Pero nadie mostró ningún desprecio. Ni siquiera la Iglesia había sido nunca tan amistosa con los no feligreses.

“¿Cuál es la razón… para informarme que esté presente hoy?” La mirada de Farrina se posó en Iron Axe.

“¿Aún recuerdas a los Caballeros de Everwinter que capturaste hace unos días en Bahía Limosa?” Iron Axe fue directo al grano. “Ya hemos confirmado sus identidades, así como los delitos que han cometido.”

Farrina de repente se dio cuenta de algo. “¿Son muy importantes para el Primer Ejército?”

“Sí y no.” Iron Axe respondió: “No son nada cuando se trata de toda la situación de guerra. Pero para las personas que han ofrecido sus vidas por la guerra, su encarcelamiento significa que los criminales finalmente no escaparán del castigo. En cierto sentido, esto consolará a aquellos que se han sacrificado a sí mismos.”

Después de eso, Farrina escuchó una historia envuelta de sangre.

Al principio, las noticias del intruso no captaron la atención de los altos mandos, ya que estos casos de refugiados que se abrían paso a través de la barrera se encontraban tres o cuatro veces al día. Eran nobles sin importancia o comerciantes ricos; sus razones para escapar se debieron a delitos o al temor de que sus bienes fueran saqueados.

Según el informe de Lorgar, los dos Caballeros de Everwinter pertenecían a los primeros, pero debido al rico y mezclado olor a sangre en ellos, los interrogadores investigaron aún más meticulosamente.

Luego de algunos juegos psicológicos y de tomar declaraciones por separado, el hermano menor cedió y reveló todo lo que habían hecho. Unos meses antes, el señor feudal ordenó a los dos hermanos que capturaran refugiados, pero como el hermano mayor tenía rencor contra Graycastle, convirtió la captura en caza.

Si hubiera sido un caso de homicidio común, el tratamiento hubiera sido la pena de muerte o la minería de por vida. Pero el asunto de la “caza de refugiados” era demasiado grave como para que la persona a cargo lo tuviera en cuenta. Al final, el caso fue entregado a la agencia de inteligencia, donde se encargó a Hill Fawkes que investigara.

El caso tenía dos grandes puntos ciegos. En primer lugar, el Primer Ejército no estaba seguro de quién había enviado la información y solo sabían que el difunto trabajaba para Black Money. En segundo lugar, la voluntad del grupo de matar a otros. Incluso si el asesinato estuvo involucrado, los dos podrían no haberlo admitido. En otras palabras, incluso si Nightingale estaba presente, les era imposible vincular la información a los dos a través de interrogatorios.

El único avance fue el olor a sangre mencionado por la Chica Lobo.

Fue una pena que Lorgar solo pudiera verificar la diversa variedad en la sangre. No pudo identificar con precisión la línea de tiempo de la sangre. Al final, su sentido del olfato fue una ventaja adicional debido a su mutación. Aunque no se vio afectada por las Piedras de Represalia de Dios, no pudo superar los límites de su fisiología.

Al final, la decisión final fue obtener la ayuda de la Unión de Brujas, que envió a Vanilla y Broken Sword.

Con el aumento de Broken Sword, Vanilla encontró las mismas feromonas en la armadura de Talos Murray y en la carta secreta. Aunque fue solo una gota, sin duda se consideró una evidencia concreta.

Si los dos nunca se hubieran conocido, ¿Cómo podrían las manchas de sangre contener las mismas feromonas?

Por lo tanto, los hermanos Murray fueron definitivamente los asesinos del mensajero.

“Tal gente existe entre la gente común…” Después de escuchar la explicación de Iron Axe, Joe no pudo evitar suspirar con tristeza.

“Actualmente, Everwinter todavía está ocupado por los demonios, por lo que no podemos difundir la noticia de asuntos tan heroicos, pero la historia nunca olvidará a personas como él.” Iron Axe suspiró. “Ustedes dos son los principales contribuyentes para capturar a los asesinos, pero no están establecidos bajo el ejército. Entonces, además de buscarlos a ustedes dos para informarles sobre los resultados de la investigación para darle un cierre, quería preguntar qué recompensas les gustaría recibir.”

“Pero ni siquiera hicimos mucho.” Farrina respondió directamente: “En primer lugar, fue esa bruja la que primero sintió sus comportamientos extraños. Simplemente escuché la conmoción y entré al final.”

Sus palabras provocaron un estallido de carcajadas bien intencionadas.

“Relájense, Su Majestad Roland nunca ignora a los contribuyentes” Iron Axe explicó: “La Unión de Brujas y el Ejército son dos departamentos separados, por lo que las recompensas de la señorita Lorgar son manejadas por otros. En teoría, sus recompensas deberían ser entregadas por la Oficina Administrativa. Pero dado que los asuntos de primera línea se tratan con los lugareños, estamos aquí para manejar la investigación.”

“Entiendo…” Farrina vaciló por un momento. “Una vez fui parte del Ejército del Juicio de la Iglesia y fui engañada por las farsas y mentiras de la iglesia. Pero si es posible, espero tener la oportunidad de redimirme.”

“¿Redimirte?”

“Sí.” Ella respiró hondo. “Unirme al Primer Ejército es la recompensa que quiero.”

La habitación instantáneamente se quedó en silencio. Los ojos de todos vagaron, como comunicando sus opiniones.

Después de un largo momento, Iron Axe habló. “El alistamiento del Primer Ejército fue elaborado por Su Majestad, no puedo aceptar su solicitud.”

“¿Es así…?” Farrina apretó los puños antes de aflojarlos un poco.

“Pero” las palabras de Iron Axe dieron un giro. “Puedo incluir sus contribuciones y solicitudes en el informe y entregarlo a Su Majestad para que decida, siempre que esté dispuesto y decidido a hacerlo.”

Farrina levantó la cabeza, revelando la luz en sus ojos. “¡Sí, por favor!”

Farrina sabía que, al incorporarse al Ejército, sus movimientos y acciones serían restringidos, los riesgos de enfrentarse al enemigo se amplificarían. Pero esa era la ruta por la que estaba sedienta: cuanto más espinoso era el camino, más sentía que podía redimir los pecados de su pasado.

…

Después de su partida, los otros oficiales se fueron, dejando a Iron Axe y Edith en la habitación.

La Perla de la Región Norte que estaba en silencio, suspiró. “Es por eso que tengo que decir que la Iglesia de Hermes es verdaderamente formidable… Dado que no se dictó ningún juicio, ¿Qué crímenes o errores tiene? Solo los piadosos creyentes de la Ciudad Santa preferirían heredar sufrimientos a cambio de una paz mental.”

Iron Axe se encogió de hombros. Ya sabía que Edith era astuta en la búsqueda de beneficios personales; sus concesiones ocasionales eran siempre para mayores beneficios. Si los beneficios eran mutuos, ella era una pareja perfecta. Pero una vez que hubo un conflicto de intereses, se volvió extremadamente difícil anticipar sus pensamientos. La decisión de Farrina de ser desinteresada y ofrecer su devoción fue algo que nunca aparecería en Edith.

Pero no le tenía disgusto a ella.

En comparación con esos especuladores tontos, egoístas o codiciosos, al menos pudo definir sus propios objetivos y no cometer errores tontos por la falta de previsión de ganancias a corto plazo.

“Entonces… ¿Cuál es tu opinión sobre el trato con los dos convictos?” Iron Axe volvió al tema principal. La respuesta de Roland a él mencionó: “Si se verifican los crímenes cometidos por los caballeros de Everwinter, tienes plena autoridad para decidir.” De acuerdo con las prácticas habituales, los dos caballeros que tenían más de cien vidas en sus manos solo tenían una ruta: ser ejecutados en la horca.

“Si los ahorcamos, no creo que Su Majestad nos haya exhortado especialmente al respecto” Edith reveló una mueca. “¿Y no crees que enviarlos en su camino es simplemente darles la salida más fácil?”

“¿Que sugieres?”

“Dado que no podemos publicar esto, ¿Por qué no enviarlos como regalos a Black Money? Después de gastar tanto en ellos, estoy seguro de que serán extremadamente hospitalarios con los dos.” (NTE: apoyo la moción con toda la violencia)

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