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Kusuriya no Hitorigoto – Volumen 03 – Capítulo 22

Capítulo 22 – Historias de Fantasmas Parte Final

 

Maomao escuchaba casi dormida mientras las historias seguían transcurriendo. Infa, sentada a su izquierda, le agarraba la mano y cada vez que algo pasaba, se aferraba a ella.

(Siguen creciendo, no, ¿han dejado de hacerlo?)

Ella pensó que con la sensación de que le presionaba. Durante ese tiempo, el turno había pasado a la persona que estaba a su lado.

Maomao se frotó sus dormidos ojos. Estaba un poco adormecida y soñolienta. En la pequeña habitación se encontraban diez personas. Todas las personas deben haber prestado atención a su olor corporal y a todos los inciensos encendidos. Maomao, que tenía buen olfato, se intoxicó un poco.

Shisui se quitó la tela que se cubrió hasta la cabeza y se llevó el fuego al rostro. Su cara que era comparativamente joven para su altura, era lisa, pero tenía una extraña intensidad cuando era iluminada por la llama parpadeante.

“Esta es una historia de un país lejano en el este.”

Shisui profundizó su inocente voz mientras empezaba su historia. Su entonación cambió gradualmente de la de una joven a la de una narradora.

 

〇●〇

 

En cierto país, había un famoso monje. El señor feudal del país vecino había fallecido; se dirigía hacia allí para celebrar una misa conmemorativa. Esto fue lo que sucedió durante su viaje de regreso a casa.

Necesitaba cruzar dos montañas para llegar a su propio templo. Como no era un viaje que pudiera hacer en un solo día, el monje decidió alojarse en un hospedaje.
Su trayecto hasta allí fue bueno. El clima estaba despejado y el viaje fue bastante favorable. En el camino, un conocido monje le dejó quedarse en su templo.

¿Cometí un error?

El monje pensó.  Debería haber seguido el mismo camino que para llegar allí, pero sus piernas extrañamente le pesaban al regresar. No había llegado al templo en el que estaba quedándose esa noche y se esperaba que llegara a los dos tercios de la puesta de sol.

El monje estaba en la búsqueda del conocimiento. No tenía seguidores con él. Tampoco tenía un caballo.

Sus alrededores eran llanuras llenas de césped de pampa, incluso si acampara ahí, podía oír a los perros(EZ: no lobos salvajes? ) callejeros aullando. No soportaría ser atacado por un grupo de ellos.

El monje que caminaba rápidamente se encontró con una vieja casa privada. Dejó de caminar y llamó a la puerta de la casa de paja.

Discúlpeme. ¿Puedo pedirles un poco de su atención?

Fue una pareja joven la que salió. El monje habló de sus circunstancias y le preguntó si podía quedarse una sola noche. Incluso la esquina de un cobertizo estaba bien.

Oh Dios, en ese caso, debes estar cansado de tus viajes.

La joven esposa dio la bienvenida al monje. Esto no es mucho, la berenjena y pepinos que sacó estaban deliciosos.

En respuesta a eso, el marido miró al monje con una mirada dudosa.

No se puede evitar que el viajero entrara indiferente en la casa de la joven pareja.
El monje tenía pocas cosas a mano. Sólo tenía el mínimo necesario para sus viajes.

A pesar de ello, la pareja lo trató como un invitado y preparó una cama en una habitación diferente.

Mientras pensaba que estaba agradecido por el suave futón, el monje se preguntó si había algo que pudiera hacer.
Y entonces, lo que podía hacer, pensando que podía proporcionarles sutras, comenzó a entonarlas.

Por lo general, se concentraba profundamente desde el principio hasta el final de sus cánticos, pero hoy estaba extrañamente consciente de los sonidos del exterior.
Aparte de los sonidos de la hierba de pampa que se balanceaba con el viento, escuchó algo que sonaba como una campana.

¿Insectos?

Mientras el monje cantaba los sutras, escuchó atentamente.
Al hacerlo, comprendió que los sonidos de campanas eran voces humanas.

¿Qué estás haciendo, querido?

Era la voz de la esposa de esta casa.

No estoy haciendo nada. ¿No te parece bien?

La voz como-campana era la del marido.

Que extraña voz, pensó el monje. No obstante, nunca dejó de entonarlas ni una sola vez.

No puedes hacer eso, querido. No quiero estar sola.

La esposa levantó la voz.

Parece que hablaban sin intención de ser escuchados, pero el oído del monje era más superior al de la gente normal. Mientras pensaba que no era bueno forzar los oídos, trató de concentrarse en sus sutras, pero siguió escuchando las voces.

Incluso si lo planeas, soy yo quien lo hará.

¿Qué vas a hacer?

Un escalofrío bajó por la columna vertebral del monje.
¿Debería detener los sutras e ir a detener a las dos personas que se pelean? ¿O debería seguir con ellas?

No, no pares las sutras. Es mejor no detenerse. Pensó el monje.

¿Qué es esto? Todo su cuerpo fue enfriado por un escalofrío. Era como si incluso su cabeza, que hacía tiempo que no se afeitaba, se le pusiera la piel de gallina.
¿Qué es esto?

Bueno, lo haré yo.

La puerta corrediza mal ajustada se abrió.

Estaba una mujer con los ojos saltones sosteniendo un hacha de guerra.

El monje sólo movió los ojos, su boca continuó entonando los sutras.

¿Adónde fue ese monje?

La mujer cruzó la parte delantera del monje con un crujido.
Pero no se fijó en él.

¿Dónde está él? ¿Se escapó?

La mujer salió de la habitación.
La estirada sombra tomó una forma extraña. Como mínimo, no era una sombra que pudiera ser considerada como humana. Se superpuso con otra extraña sombra más.

Busca, tú, ve a buscar. Si no lo haces, si no lo haces.

La mujer estaba impaciente. ¿Por qué estaba impaciente?

Lo haré……

Oyó una campana sonando.

Lo que continuó ese sonido fue un sonido de masticar como un papel arrugado.
El sonido de masticar continuó.

Durante ese tiempo, el monje continuó entonando los sutras.
Cantaba, y con el final del sonido, salió fuera.

No saludó a la joven pareja, no hizo contacto visual con ellos, salió de la casa.

Las alas de un insecto marrón pálido cayeron.

Ring. Ring.

El sonido del insecto que escuchó de la hierba de pampa desapareció.

El monje juntó sus manos sobre las desgarradas alas de los insectos, y mientras cantaba los sutra, continuó caminando hasta el amanecer. (EZ: Rayos O.O eso asusta)

 

〇●〇

 

La entrega de la historia es importante, pensó Maomao.

Todas estaban inmersas en la historia de Shisui.

Por lo general, hablaba de manera inocente, pero en realidad era una persona diferente cuando contaba una historia. De un costado, incluso su rostro iluminado por la llama parecía una persona diferente.

(Tengo la sensación de que la he visto antes.)

Ella también lo había pensado antes, pero aún no podía recordar a quién se parecía o donde.

Mientras Maomao miraba distraídamente el perfil lateral de Shisui, la chica sonrió y la miró. La niña apagó la vela en sus manos, puso el aceite y la mecha dentro del brasero y la guardó.

“Siguiente, eres la siguiente”.

Shisui sonrió dulcemente.

Ah, así es, asintió Maomao. Si ella vino a un lugar así, también debe contar una historia.

(¿Qué debo decir?)

Honestamente, Maomao no creía en estas cosas. Por lo tanto, como no se le ocurrió una historia interesante, como último recurso, decidió contar una historia que escuchó de su padre hace mucho tiempo.

“Esto es algo de hace un par de décadas. Hay una historia de hitodama[s] saliendo de las tumbas.”(EZ: Link)

Quizás porque Maomao era la que hablaba, Infa se alejó de Maomao y se cubrió con la tela sólo mostrando sus ojos.

“Diciendo que es realmente extraño, hubo jóvenes valientes que fueron a buscar la forma real de las hitodamas. Y al hacerlo,”

Infa miró a Maomao con los labios en zigzag. Si estás asustada, deberías cubrirte los ojos, pensó Maomao.
Desafortunadamente, la historia de Maomao no era la historia de fantasmas que la gente esperaba.

“No hubo tal cosa. Fueron los hombres que vivían en la misma ciudad los que fueron al cementerio. Las luces vacilantes eran sólo lo que alguien había llamado las hitodamas.”

Eso fue todo, Infa suspiró aliviada.

“Sólo alborotaron/perturbaron las tumbas un poco.”

Con un golpe, la frente de Infa chocó contra el hombro de Maomao. La mirada de Infa se dirigió hacia Maomao.

“Perturbar las tumbas, dices.”

“Sí. Como si cayeran en una maldición cuestionable, aplastaron tripas humanas y cubrieron sus cuerpos con ella….”

Con otro golpe, esta vez la frente de Infa golpeó la frente de Maomao.
Mientras Maomao se frotaba la frente, terminó el cuento con un “Eso es todo”.

El turno de Infa fue el siguiente, pero lo terminó incoherentemente, y luego fue la última vela que quedó.

La dama del palacio que les había dado la bienvenida al principio estaba esperando con la última vela.

(Dicho esto.)

Las damas del palacio estaban alineadas de tal manera que había una en cada uno de los cuatro puntos con dos personas entre ellas. Debería haber doce personas en total.

Pero, ¿esta dama del palacio no mencionó al principio que había “Trece historias”?

¿Qué se supone que significa eso? Se preguntó Maomao.

La dama del palacio contó una historia de la época del anterior emperador.
Era la historia de una chica que se convirtió en una de las muchas damas del palacio.

No le llegó a la cabeza. Estaba mareada.

Aturdida, Maomao miró al brasero que tenía delante.

(¿Eh?)

La dama del palacio dijo algo que dio un golpe de miedo, todas se estremecieron, pero Maomao no la escuchó bien.

“Bueno, entonces, y esta es la decimotercera historia.”

Cuando la dama del palacio iba a entregarlo a la siguiente, fue cuando el brasero, el último fuego, se apagó.

Maomao se levantó y fue a abrir la ventana cerrada.

“¡Hey, Maomao!”

Infa fue a detenerla, pero Maomao no se iba a detener ahí.

El viento se precipitó repentinamente; los trapos que todas llevaban revoloteaban.

Maomao respiró el aire que acababa de entrar y exhaló.

(Pensé que mi mente estaba en blanco.)

El fuego extinguido fue puesto en el brasero. Había carbón dentro. El fuego que quedaba seguía ardiendo allí.
En una pequeña habitación cerrada, el carbón se quemaba con combustión incompleta. Si eso se completara, ¿qué pasaría? (EZ: intoxicación por CO2 supongo?)

Maomao corrió hacia la insensata dama del palacio que estaba entre las que rodeaban el brasero y la abofeteó un par de veces. Luego la llevó a un lugar que tuviera aire fresco. (EZ: jajaja esta chica XD)

Al ver que, como si entendiera la situación, Infa fue a ayudar a Maomao.

Si quemas fuego en un lugar que no tiene suficiente aire, liberará un gas que dañará el cuerpo humano.
Parece que su cabeza estaba en blanco por eso.

(Fui demasiado lenta para darme cuenta.)

Mientras se preguntaba por qué no se había dado cuenta antes, pensó que la organizadora había hecho algo malo.
Maomao fue hacia la dama del palacio, pero no había nadie ahí.

“…Ah, solo un poco más era suficiente.”

Oyó esa voz, pero la dama del palacio no estaba por ningún lado.

“Oye, ¿qué pasa con esa historia de hace un momento?”

Debilmente, tras la clausura del evento, preguntó Shisui.
Infa inclinó la cabeza, “¿Quién es esta chica?” Shisui parecía estar contenta de usar la tela, continuó cubriéndose con ella.

“La anterior, ¿no?”

Era la historia de los hitodamas. Parece que recordó que Maomao dijo que se lo explicaría más tarde.

“El asunto del bosque tabú podría ser una superstición. Pero, no puedo declarar que el proverbio es completamente incorrecto.”

Por ejemplo, en el caso de que haya muchos peligros en ese bosque.
El bosque era abundante en alimentos, pero al mismo tiempo, también es abundante en cosas que no se pueden comer.

Hipotéticamente, ¿qué pasa si los orígenes del proverbio del bosque tabú provienen de eso? Si tomamos que era un pueblo que sólo tenía gente que venía de otras tierras.
No puedes tomar imprudentemente la comida que hay ahí, esta dañará el cuerpo. Ese proverbio, con el paso del tiempo, podría haberse convertido en ‘Tabú’.

Y entonces, simplemente por el simple hecho de que se atengan a esas instrucciones, puede llegar a ser que no puedan diferenciar entre lo que se puede comer y lo que no se puede comer en el bosque.

En la cual, ella podría hacer tal conjetura.

Debido a la mala cosecha, la madre y el niño hambrientos trataron de comerse la generosidad del abundante bosque. No obstante, violaron la ley del pueblo. Por eso se escabulleron en el bosque.
En la noche, aunque todavía había luz, era un tiempo en el que era difícil ver los alrededores. Utilizaron ese corto período de tiempo para entrar en el bosque, y recolectaron hongos, frutas y nueces.

Y luego, regresaron a casa al mismo tiempo que se ponía el sol.

Sin saber exactamente qué es lo que cosecharon.

“Hay un hongo que se llama hongo de luz de luna.”

Hablando de hongos, el rostro de Maomao se retorció durante un instante, pero no le prestó atención y continuó hablando.

“Es un hongo que parecía delicioso, pero es venenoso. Te dolerá el estómago si te lo comes. Y, como su nombre indica, tiene un rasgo curioso.”

Cuando oscurezca, se iluminará. Su aspecto es muy bello. Tan bella que recordó que cuando inconscientemente lo recogió y se lo puso en la boca, su padre la obligó a vomitarlo.

La madre y el niño cosecharon antes de que los hongos brillaran, y aunque no sabían que brillaban, caminaron a casa en la oscuridad. La luz que se derramó de su cesta, podría haber sido vista como hitodamas desde la distancia.

Y luego, al llegar a casa y encender las luces, el brillo se apagará, y si se los comen, lo demás es obvio.

Aunque fuera un veneno que normalmente no te mata, ¿qué pasaría si fueran personas desnutridas? El niño murió, y la madre también.

Y luego, lo que la madre quiso decir al final.

(Hay deliciosos hongos en el bosque.)

era lo que ella podría haber querido decir. Como mera venganza a los aldeanos que no ayudaron a la madre y al niño.

“Así que eso es lo que paso…”

Shisui, con una mirada de satisfacción, volteó la tela.

“Bueno, entonces, me voy por aquí…”

Ella parloteaba como una niña pequeña mientras lo decía.
No puedo hablar por otros, pero tiene una personalidad libre/Única, pensó Maomao.

“Humph, no fue algo significativo.”

Infa cambió la atmósfera que tenía hasta ahora y en gran medida hinchó su pequeño pecho.

“Resulta que las otras historias tienen un lado opuesto.”

“Me pregunto.”

Maomao e Infa volvieron al Palacio de Jade.

“Oh, volvieron antes de lo que esperaba.”

Fue Honnyan quien las estaba esperando. Estaba haciendo labores de costura.

“Sí, hubo un poco de conmoción.”

“Vaya. Lo sabía.”

Dijo Honnyan, entendiéndolo por alguna razón.

“La dama del palacio que lo hacia hasta el año pasado murió. Me preocupaba quién se haría cargo este año de ello”.

Honnyan dejó la aguja y suspiró profundamente.

“Era una dama de palacio sensata y me había cuidado a mí también. Al final, terminó sin salir del palacio interior”.

Maomao miró el rostro de Infa. Su valiente rostro se fue poniendo pálido poco a poco.

“¿Quién era esta dama del palacio?”

“…Esta historia se queda aquí de acuerdo?. Era la amante del anterior emperador. No me gustan mucho esas cosas, pero es grosero detenerlo si se hacía por diversión. Por eso, ya sabes, como ella murió el año pasado, me preguntaba si ya no lo harían otra vez, pero estoy contenta de que haya gente que lo siga haciéndolo”.

Honnyan empacó las herramientas de costura en la caja barnizada y se fue a su habitación bostezando.

Cuando pensó que ya había oído algo así antes, se dio cuenta de que era similar a la historia de fantasmas que había contado la dama del palacio que organizaba el evento. Maomao no recordaba los detalles, pero al ver la tez de Infa, podía adivinar que era exactamente lo que había pasado/dicho en su historia.

(Hm.)

Maomao cruzó los brazos e inclinó la cabeza.
Hay muchas cosas inciertas en el mundo.(EZ: No lo creen?)

Por ahora, es un alivio que hayamos terminado sin llegar a la decimotercera historia, pensó.

Sólo que, esa noche, la aterrorizada Infa compartió la cama con ella. Hacía calor y no podía dormir bien. (EZ: XDXD)

 

 

Nota del autor:

Hay comentarios que dicen que muestre a Jinshi, pero está descansando hasta que se recupere del shock. Está cumpliendo con sus deberes oficiales a pesar de haber perdido los nervios.

T/N: Pobre Jinshi jaja. Bueno, las notas del autor (si las hay) serán formateadas como arriba de aquí en adelante.

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Nina
Nina
hace 10 meses

Qhe koxas no?

Lis
Lis
hace 10 meses

Pero entonces no hay capítulo 20? No entendí bien que pasó, estaban en la cueva y ella tocó algo que no debía >.< pero al final si obtuvo su hongo

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