Goblin Kingdom — Volumen 1, Capítulo 69

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El arte de planear

Ha pasado un año desde que nació Kuzan.

Con su débil cuerpo, no era posible que ella saliera. Así que toda su vida, su patio de recreo siempre ha sido una cueva oscura y estrecha.

Originalmente, el nombre Kuzan pertenecía al fundador de la tribu Gordob. Pero desde entonces, se ha transmitido por generaciones.

Cuando la actual Kuzan recibió ese nombre, trajo consigo un importante deber. Un deber que tenía que llevar con su débil y frágil cuerpo. Ese deber era escuchar la voz del Lord de la Plaga.

Y 10 días después de haber recibido el nombre de “Kuzan”, oyó por primera vez la voz del Lord de la Plaga.

“La maldad saldrá del Este… Con cuatro tesoros… Ante mí…”

Cuando esa voz fragmentada llegó a sus oídos, todo su cuerpo tembló ante la puerta.

La sangre de sus antepasados que dormía en sus venas, se despertó, expulsando la ansiedad que llenaba su corazón cuando de repente se convirtió en Kuzan, y reviviendo en ella los recuerdos de sus predecesores. Aunque sus propios recuerdos han quedado intactos, el calor de sus antepasados la llena ahora.

Con alegría, aceptó el deber de vigilar la puerta.

Pero…

¿Qué quiere decir el Lord de la Plaga con “maldad”? Los cuatro tesoros son definitivamente los cuatro tesoros de las cuatro tribus, pero… ¿Qué quiere decir con “maldad”?

La chica que acababa de oír por primera vez la voz del Lord de la Plaga, no sabía qué hacer. Así que se dirigió a su ayuda y su padre, Yellow. Pero al final, no sabían exactamente qué vendría del Este. Además, cuando fue a la puerta a preguntar, vio figuras de gigantescos demonios que se parecían a la fortaleza. No sólo uno, sino un montón de ogros. Uno de ellos sobresalió claramente de la manada, poseyendo mayor poder que el resto. Lo más probable es que fuera el líder de la manada.

Después de verlo, huyó rápidamente de la fortaleza y consultó a Yellow.

Concluyeron que la ayuda de las tribus era necesaria.

Así que llamaron a los jefes de las otras tres tribus: el más fuerte de ellos entonces, Gilan de Ganra, el más fuerte ahora, Rashka de Gaidga, y el más viejo de ellos, Aluhaliha. Pero al final, no pudieron llegar a un acuerdo.

Sin la fuerza de guiar, los goblins no escuchan. Tras habérsele dicho eso, Kuzan propuso un plan bajo el pretexto de una profecía.

Anunciaron que los 400 años de alto el fuego que la Diosa del Inframundo (Altesia) dejó atrás han sido revocados. Pero por supuesto, con el templo ahora invadido por ogros, tal profecía no sería aceptada.

El goblin más favorable entre ellos cuando se trataba de profecías, Rashka de Gaidga, habló.

— La “maldad” debe referirse a un enemigo.

— Es sólo con la ayuda del rey que seremos capaces de mantener nuestra posición.

Esas palabras se convirtieron en un ímpetu, haciendo que el ambicioso Rashka reforzara sus fuerzas. Viendo eso, Kuzan, que era consciente de su talento en éter, le enseñó cómo usarlo. Entonces ella le dijo que dijera esto.

“He sucedido el asiento del oráculo de la puerta del inframundo.”

El oráculo del inframundo. Desde el principio, ese era un asiento que los Gordob debían llevar. Así que declarar eso era lo mismo que decir que la tribu Gordob estaba ahora bajo su dominio. En cuanto a cualquier rebelión de la propia tribu Gordob, las palabras de Kuzan los acallarían inmediatamente.

Rashka estaba conmocionado, pero Kuzan y Yellow solo le asintieron.

— Ha llegado el momento. Te convertirás en el rey y salvarás a las cuatro tribus.

Esas dulces palabras eran como miel, y Rashka cayó en su tentación.

“No hay necesidad de confiar en un rey de cuento de hadas” Declaró Rashka. “¡Abriré un camino con mi propio poder!”

Joven y ambicioso, Kuzan, que había ganado los recuerdos de sus antepasados, lo manipuló como un violín.

Rashka lideró las fuerzas de Gaidga, desafiando a la tribu más fuerte entonces, Ganra. Y enfrente de él no había otro que el primer arquero (Gadieta) y el jefe de la tribu más fuerte, Gilan.

Al principio, la batalla favoreció al veterano Gilan, pero con Rashka siendo capaz de usar éter, la batalla terminó finalmente a su favor.

Pero entonces surgió un problema.

Los ogros junto a las puertas del inframundo comenzaron a moverse fuera de la Fortaleza del Abismo.

Rashka y su tribu trataron de detenerlos, pero no pudo conseguir resultados notables. Pero eso no era muy sorprendente, después de todo, cada uno de los ogros era fuerte.

Así que incluso con la magia de Rashka, y con Aluhaliha en una bestia jinete, e incluso con todos los goblins detrás de ellos, la amenaza de los ogros no era algo que pudieran vencer fácilmente.

Fue en esa época cuando Gilmi de Ganra pidió ayuda a un goblin del este.

— Hay un intruso viniendo del este.

Cuando Kuzan se enteró de la fuerza del goblin a través de Yellow, finalmente se dio cuenta de lo que realmente significaba esa profecía.

Lo que han estado anhelando durante todo este tiempo finalmente ha llegado.

Cuando se dio cuenta de eso, la vergüenza la llenó por el estúpido plan que hizo. Pero aún así, necesitaba cumplir con su deber.

Necesitaba cumplir las palabras de aquellos que protegen las puertas del inframundo.

El goblin “malvado” recogerá los cuatro tesoros.

Bajo sus órdenes, Yellow utilizó la habilidad del Titiritero para controlar a un pájaro de desgracia y rastrear sus movimientos.

Y una y otra vez, las acciones del goblin movían sus corazones, confirmando sus sospechas.

Ahh, pensaron. Este es el goblin que nos salvará.

E invitaron a este goblin que derrotó a Rashka a la casa de los Gordob.

Y en las paredes de su siempre oscura cueva, sus palabras resonaban.

“¡Abriré un camino al Lord de la Plaga!”

Ahh, qué palabras más fuertes.

De hecho, para estos goblins débiles y frágiles, la salvación – finalmente – ha llegado.

◇◆◇

Sólo soy un humano, así que no hay forma de que pueda predecirlo todo. Lo único que puedo hacer es hacer lo mejor que pueda para crear el mejor resultado. O al menos, eso es lo que yo creo. Pero… ¿Es éste el mejor resultado que he estado buscando?

Fricción innecesaria entre los goblins y un baño de sangre derramado.

Fruncí mis cejas.

Si es sólo el resultado del que estamos hablando, entonces he logrado unir a los goblins.

Si no hubiera sido por ellos luchando entre ellos, probablemente no habría sido capaz de unificarlos.

El Gran Gilan de Ganra. Él habría liderado las cuatro tribus, y aunque las ambiciones de Rashka pueden haber sido grandes, dudo que hubiera empezado una revuelta.

Pero aun así… Aun así… Por alguna razón, no puedo quitarme este disgusto.

Este complot y maquinación que Yellow y Kuzan me dijeron – No, eso no está del todo bien. No me lo dijeron, les pregunté. Pregunté, así que respondieron.

Estaba perdido.

Kuzan estaba postrada ante mí, pero… ¿Qué debería hacer?

“Oh rey. Por favor, exija juicio sobre los ogros que han tomado la fortaleza.”

Eso también me ha estado molestando.

¿Por qué? ¿Por qué ahora? De todos los tiempos, ¿Por qué aparecieron repentinamente los ogros?

Las cuerdas están siendo tiradas…

Mientras pensaba eso, sentí como si alguien se riera dentro de mí.

— La Serpiente Roja, Pitch Black (Verid), que estaba enrollada alrededor de mis brazos como la encarnación misma de las llamas negras. Se sentía como si se riera de mis problemas.

Como se esperaba del regalo de esa mujer. ¡Qué irritante!

“Bien.”

Necesito calmarme. Necesito saber exactamente quién está al otro lado de la Puerta del Inframundo.

“Cuando llegue Narsa, nos dirigiremos a la Fortaleza del Abismo.”

Kuzan es la más familiar cuando se trata de la Fortaleza del Abismo. Definitivamente voy a necesitar su conocimiento como Kuzan. Pero me pregunto… ¿Aceptar este disgusto es una amenaza para mis planes de crear un reino?

No, aplacemos eso para más tarde. Encontrarme con el llamado Lord de la Plaga para consolidar mi posición entre las cuatro tribus es lo primero. Después de eso, tomaré una decisión.

Una decisión sobre lo que debería hacer con ella.

Pero de nuevo… No soy exactamente inocente.

Después de todo, sacrificaría cualquier cosa por el bien de mis objetivos.

Así que sabiendo eso… ¿Puedo realmente juzgarla?

En los ojos de Kuzan se refleja sólo una cosa: Un deseo de hablar con el Lord de la Plaga (Diskorado) al otro lado de la puerta.

O quizás, en vez de un deseo, debería llamarlo amor.

A pesar de todo, ¿Es eso realmente algo que tengo derecho a juzgar?

¿Es esa la clase de rey que aspiro a ser?

Sin una pizca de una respuesta surgiendo, esperé a que llegara Narsa.

◇◆◇

“Cuánto tiempo sin verte, Jefe del Este.”

Le llevó dos días a Narsa traer el Arco del Meteorito (Byunei Bow).

Su cara estaba mucho más tranquila ahora, como si por fin se hubiera liberado de alguna duda.

“¿Pasó… Pasó algo?”

Sin pensarlo, esas palabras se me escaparon. Narsa miró a Gilmi durante un momento, y luego sonrió irónicamente.

“No. Nada en particular.”

“Ya veo.”

Me pregunto si pasó algo entre ella y Gilmi. Bueno, eso probablemente no es algo que pudiera entender. En cualquier caso, si es beneficioso para ella, no debería ser algo malo.

“¿Sabes por qué te llamé aquí?”

“Sí.”

Inmediatamente, se arrodilló sobre una rodilla.

“He oído de Lord Kuzan que estaremos subyugando a los ogros en la Fortaleza del Abismo.”

Ya veo… Así que su cambio fue por Kuzan.

“Por eso nuestros cuatro tesoros serán necesarios. Por favor, haz uso de ellos.”

En el pasado, ella me trataba como su igual debido a la alianza, pero ahora está actuando como una sirvienta.

“Definitivamente recuperaré la Fortaleza del Abismo. Préstame tu poder, Narsa.”

“¡Por tu voluntad!”

Con esto, Ganra quedó oficialmente bajo mi mando.

No me gusta Kuzan, es como una fanática y eso siempre, SIEMPRE, trae problemas, pero bueno.

¡Hasta el próximo!

Traductor: Krailus

Editor: Reika

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