Espada del Amanecer — Capítulo 179

Capítulo 179 – Un Dulce Sueño

EZ: 2/3

Finalmente, sólo Gawain, Amber y el vizconde Kant quedaron en el estudio. Sir Philip hizo guardia en la puerta. Por un tiempo, parecía estar especialmente tranquilo dentro de la habitación.

El Vizconde Kant tomó lentamente un respiro. Sintiendo que su fuerza física se recuperaba gradualmente, reveló una amarga sonrisa. “Fue literalmente una pesadilla”.

“Sí, una pesadilla.” Gawain inclinó la cabeza para mirar a este viejo vizconde. “Creo que no sabe la razón del abrupto cambio de temperamento de su mayordomo, ¿verdad?”

“Tal y como he dicho antes, no tengo ni idea.” El vizconde Kant pareció espaciarse en ese momento. Después de eso, meneó la cabeza con nostalgia. “Ha estado cuidando de mí durante décadas, siempre sirviendo lealmente al Clan Kant, pero parecía haberse convertido en una persona diferente antes—”

“¿Ha oído hablar de los Durmientes Eternos?” Gawain repentinamente cortó al Vizconde Kant. Le miró fijamente a los ojos y le preguntó sin rodeos.

Amber a un lado no pudo evitar mover sigilosamente su mano hacia la daga de la cintura y retroceder hacia la sombra de Gawain al mismo tiempo.

“¿Durmientes Eternos?” El vizconde Kant frunció el ceño y luego asintió lentamente. “Sí, he oído hablar de ellos. Son creyentes del caído Dios de los Sueños. Se dice que se meten en el subconsciente de sus víctimas cuando ésta tiene una pesadilla, y luego controlan e incluso reemplazan la conciencia de la persona. ¿Podría ser que Carter haya sido controlado por los Durmientes Eternos?”

Viendo tal reacción del Vizconde Kant, Gawain permaneció inexpresivo. No reveló el más mínimo indicio de cambios en las emociones. Después de eso, meneó la cabeza. “En cualquier caso, lo que más necesitas ahora es descansar. ——Duerma bien y permita que su fuerza física se recupere. Y sugiero que sea mejor que consigas más sirvientes que vengan a hacerle compañía. Se está haciendo viejo, y esta vez ha perdido demasiada fuerza. Necesita a alguien que vigile a su lado para estar a salvo.”

El Vizconde Kant inclinó su cabeza sinceramente. “Gracias por su preocupación.”

Gawain y Amber dejaron el estudio. Sir Philip, que mantenía la guardia en la puerta, se presentó inmediatamente. “Lord, ¿cuál es la situación adentro?”

“El vizconde Kant se ha recuperado —— aparte de estar un poco débil.” Gawain se adelantó con pasos rápidos mientras hablaba en voz baja, “Todas las pistas actuales apuntan a ese viejo mayordomo —— al menos eso es lo que parece en la superficie.”

Sir Philip vaciló por un momento. “¿En la superficie? Mi Lord, ¿todavía tiene otras sospechas?”

“El momento del ‘cambio de temperamento’ del Mayordomo Carter fue demasiado perfecto.” Gawain frunció el ceño. “Si era un hereje de los Durmientes Eternos o un Extraordinario hechizado por estos, entonces debería haber estado preparado con todas las respuestas antes de que llegáramos al castillo. Y si no fue capaz de hacerlo, entonces simplemente no debería haber tomado ninguna acción porque todos los planes de captura de esclavos fueron autorizados por el Vizconde Víctor. La ‘resurrección’ de la Vizcondesa también dirigiría la sospecha hacia Victor Kant. El Mayordomo Carter no necesitaba hacer nada, y naturalmente podía estar libre de cualquier sospecha —— la sospecha recaería desde hace mucho tiempo sobre el Vizconde Kant.”

Amber parpadeó y se iluminó lentamente. “Recuerdo que fue cuando estábamos discutiendo nuestras sospechas sobre el Vizconde Kant cuando el Mayordomo Carter repentinamente llevó a cabo el (intento de)asesinato… ¿Estaba activamente trasladando la sospecha a sí mismo? ¿Así que el verdadero motivo del Mayordomo era en realidad proteger a su maestro?”

Entonces ella rápidamente llegó a una revelación. “¡No es de extrañar! ¡Por eso esa daga evitó sus partes vitales!”

“¡De esa manera, podemos estar más seguros de que el Vizconde Kant debe ser el que está detrás de todo esto!” Un atisbo de entusiasmo apareció en el rostro de Philip; un sentimiento de rectitud comenzó a golpear el pecho de este joven caballero. “¡Mi Lord, es hora de destruir los planes de ese creyente del culto hereje!”

Gawain tenía una mirada solemne. Todavía tenía la molesta sensación de que se le había escapado algo, pero al final tuvo que asentir. “De hecho, no podemos retrasarlo más. Pero antes de alertar al Vizconde Kant, tenemos que encontrar primero el núcleo que sostiene el ‘espacio ilusorio’, suspender la magia ritual y separar al Vizconde Kant de ese núcleo mágico. Si mi juicio es correcto, el objeto que sostiene esta magia debería ser una linterna”.

“¿Linterna? ¿No lleva la Vizcondesa a menudo una linterna en la mano?” Amber lo recordó enseguida —— era muy consciente de cualquier cosa que pareciera valiosa, y esa linterna parecía ser de gran valor. “¿Es esa? ¿Entonces puedo ir a robarla?”

“Se ve igual, pero me temo que la linterna en las manos de Lilith Kant es simplemente una falsificación.” Gawain meneó la cabeza. “La verdadera linterna posee un poder mágico extremadamente evidente. Debe ser colocada cerca de donde Lilith Kant se queda a menudo.”

El trío ya estaba de vuelta en la habitación de invitados en este momento. Gawain se sirvió un vaso de agua pero no lo bebió. En su lugar, miró hacia Amber después de una breve contemplación. “Necesito que vayas a hacer algo —— tu antigua profesión”. (EZ: La Lady bandido vuelve a la Acción xD)

“No hay problema, soy hábil en esas cosas.” Amber se dio una palmadita en el pecho con una mirada arrogante. “Dilo. ¿Dónde están las tumbas ancestrales de los Kant?”

“…¡No te estoy diciendo que vayas a desenterrar sus tumbas ancestrales!” Gawain casi no recuperó el aliento. Pensó: Por suerte, aún no había bebido agua. De lo contrario, seguramente moriría asfixiado por esta última desgracia. “Voy a hacer que vayas a buscar la verdadera linterna —— y si es posible, que la robes.”

“Así que al final todavía tengo que robar una linterna.” Amber puso los ojos en blanco. “¿Entonces tienes que darme una perspectiva aproximada? Este castillo es enorme!”

“Torre norte. Lilith Kant reside en la torre norte durante todo el año. Si no he adivinado mal, estará en el sótano”, dijo Gawain. “Supuestamente, ella vive ahí por su débil constitución y fotofobia[1], pero parece más bien una especie de arresto domiciliario”.

Amber levantó una ceja. “¿Sótano? El poder de las sombras en ese tipo de lugares es muy fuerte. Es donde puedo poner mis habilidades a buen uso!”

Después de que Amber partió, sólo Gawain y Sir Philip se quedaron en la habitación. Este último se quedó en silencio en un lugar cerca de la puerta, responsable de estar en guardia, mientras Gawain sostenía su vaso de agua y reflexionaba en detalle sobre el origen de esa ligera sensación de conflicto en su corazón.

Sir Philip rompió el silencio. “Lord, ¿está bien que Amber vaya a robar el núcleo del ritual? Con su habilidad para el combate…”

“Si todo va bien, no necesitara luchar en absoluto. Si realmente se encontrara con un enemigo y le resultara difícil tener éxito, definitivamente correra de vuelta en el primer momento”, dijo Gawain mientras meneaba la cabeza. Su mirada se posó en el vaso de agua que tenía en la mano; la superficie de agua ligeramente ondulada reflejaba su rostro mientras sus pensamientos iban a la deriva en algún lugar aún más lejano. A medida que sus pensamientos vagaban, la linterna en la mano de Lilith Kant apareció de repente en su mente.

Recordó vagamente que hace 700 años, después de haber regalado esa linterna a Selena Gerfen, ella había fusionado el poder de la linterna con sus propias teurgias de los sueños. ¿Pero cuál era el uso específico de la misma?

Selena parecía haberlo mencionado antes… Vagaba por las pesadillas de los soldados; esos sueños estaban a menudo llenos de caminos retorcidos y desordenados y capas de densa niebla, y la linterna era capaz de mostrarle el camino correcto, de tal manera que era improbable que se perdiera en el reino de los sueños y era capaz de ver claramente las apariencias reales de estos…

Una linterna que muestra el camino… ¡¿Linterna?!

Gawain se dio cuenta de repente de dónde había estado el mayor punto ciego de sus pensamientos.

Y al darse cuenta de este punto ciego, una increíble verdad tomó rápidamente forma en sus conjeturas. Esta verdad estaba tan en contra de la razón, tan inimaginable, ¡pero probablemente era lo que realmente había sucedido en este castillo!

Gawain se levantó de repente y puso el vaso de agua en su mano sobre la mesa. Sir Philip, que estaba de pie junto a la puerta, se sobresaltó. “¿Mi Lord?”

“¡Nos equivocamos!” Gawain se acercó rápidamente a la puerta. “¡Nos equivocamos completamente desde el principio!”

Sir Philip estaba confundido por la exclamación incoherente de Gawain. “¿Usted se equivocó? ¿Qué hemos hecho mal?”

Gawain presionó su mano en la manija de la puerta, se dio vuelta y se concentró en los ojos del joven Caballero con el ceño fruncido. “¡Esto no es el sueño del Vizconde Kant! ¡Rápido, ven conmigo!” (EZ: Yep)

Los dos salieron de la habitación, y en el curso de la prisa por todo el pasillo, Gawain rápidamente transmitió sus conjeturas y descubrimientos al Caballero que estaba a su lado.

Los ojos de Philip se abrieron más y más. Al final, todo su ser ya estaba completamente aturdido. “¿A-, algo así sería realmente posible?”

Entonces rápidamente volvió a sus sentidos. “¡¿Entonces Amber no estará realmente en peligro?!”

“No, de acuerdo con mi evaluación, ella aún no se encontrará con el peligro en esta etapa porque el creador del sueño aún no ha despertado,” Gawain habló rápido. “Sólo que tenemos que separarnos ahora… Philip, tengo una tarea para ti.”

“¡A su servicio, Mi Lord!”

“Ve a la parte de atrás del castillo, encuentra un establo abandonado, y usa tu habilidad de detección del mal para buscar…”

Sir Philip salió por órdenes mientras Gawain corrió por el pasillo, subió las escaleras y llegó al estudio de Victor Kant.

El estudio estaba envuelto en una extraña, apagada y sombría atmósfera como antes. El vizconde Victor Kant se sentó tranquilamente detrás de ese pesado escritorio, inmóvil como una escultura.

La mirada de este viejo vizconde estaba en las pocas hojas de papel que tenía ante él. Sólo cuando Gawain se puso frente a él levantó lentamente la cabeza y dijo en un tono indiferente. “Está aquí, Duque”.

Gawain miró en silencio a los ojos del Vizconde. En la mirada de la otra parte, vio un rastro de dolor y alivio, pero no había miedo.

“Parecía… saber que yo iba a venir.”

“Sólo tuve una premonición.” El vizconde Kant reveló una sonrisa rígida. “Ahora puede hacer lo que quiera.”

“Vine aquí sólo para contarle una historia”. Gawain se trajo una silla de la esquina y se sentó frente al Vizconde Kant. Observando el rostro envejecido de la persona, su tono era suave y cálido. “Esta historia comenzó en una noche de lluvia torrencial, hace más de treinta años…

“Esa noche, el joven vizconde del territorio Kant, que es usted, estaba en un carruaje que iba a toda velocidad en una noche lluviosa. Su esposa e hijo estaban a bordo.”

“Debido a un bloque resbaladizo de barro o roca, el carruaje se deslizó hacia el arroyo de la montaña, y muy desafortunadamente, usted fue arrojado del carruaje.

“Sr. Victor Kant, usted murió en el acto —— junto con su hijo.

“Aunque su aún más desafortunada esposa, la Madam Lilith Kant, claramente no pudo soportar tal golpe y la presión…”

“Así que eligió que ella misma ‘muriera’, mientras que su esposo e hijo ‘sobrevivieron’.  ——  Al menos en un reino de sueños, así fue como se desarrollaron las cosas.

“Eso es todo, Sr. Vizconde.”

Victor Kant se sentó tranquilamente en la silla. Dejando escapar un suspiro, su voz era tan tenue como si viniera de otro mundo. “Literalmente una pesadilla, ¿no es así?”

“Sí, es en verdad una pesadilla.”

Notas

[1] Fotofobia – intolerancia a la luz

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