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Una Cierta Chica y la Vanguardia de Jornes (Lado de Milia)

—¿Q-Qué debemos hacer…? —Sostuve mi cabeza dentro de la casa

Obviamente, Jornes no es un oponente contra el que unos simples humanos puedan hacer algo.

La Ciudad Santa de Lidom está cubierta por un extenso muro mágico, por lo que no podemos escapar. Además, la ciudad está siendo atacada por una multitud de monstruos espeluznantes debido al [Nirvana] de Jornes.

—¡D-De cualquier manera, tenemos que esperar a que regrese la Santa Lilyxila! … Incluso si no ha derrotado al dragón, si sabe lo que está pasando en la Ciudad Santa, podría ser capaz de regresar. (Meltier)

Meltier-san parecía preocupada por mí.

—Sin embargo, no será fácil esconderse de ese grupo de monstruos. ¿Cuánto tiempo pasará hasta que la Santa Lilyxila regrese…? (Milia)

E incluso si regresa, no creo que pueda hacer nada en contra de Jornes.

Se dice que la Santa Lilyxila tiene un poder que rivaliza con los dragones de Rango A.  No obstante, Jornes claramente no es un oponente de dimensión.

Si la Santa Lilyxila es una maga a la altura de un dragón de alto rango, entonces Jornes es una maga a la altura de un dios. Incluso la Santa Lilyxila no podría destruir toda la Ciudad Santa en cuestión de minutos.

—Nada… no hay nada que podamos hacer. El resistirse solamente extenderá el… tiempo del terror… No hay ningún ser humano en este mundo que sea más fuerte que Jornes. —Dijo la abuela con el rostro pálido.

Y justo entonces, la puerta de la casa se abrió de golpe. Un monstruo con un cuello inusualmente largo y con la cara al revés irrumpió en la casa.

Es uno de los monstruos que creó Jornes de los cadáveres con [Nirvana].

—¡Milia, utiliza [Escudo de Arcilla]! —Gritó Meltier-san.

—¿Eh…? ¡S-Sí! ¡[Escudo de Arcilla]!

Hice lo que me dijeron y desplegué mi [Escudo de Arcilla].

Un escudo circular de tierra cubrió delante de nosotras. Rápidamente, Meltier-san se puso a mi lado y pateó el escudo de arcilla hacia el monstruo.

Esta es una casa pequeña. En lugar de evitar al monstruo, eligió impedir que pasara. Extendió sus dos manos para coger el escudo.

—Por esa forma de luchar… ¡Su nivel no debería ser tan alto! ¡Hagámoslo! —Meltier-san apuntó con su espada al monstruo—. ¡[Luna Luchen]!

Su espada brilló, y la luz vuela hacia el monstruo como tres masas de calor. También apunté con mi bastón al monstruo.

—¡[Esfera de Fuego]! (Milia)

Los brazos del monstruo estaban bloqueados por el escudo circular, así que recibió nuestro ataque en su cabeza.

Después de tener su postura rota por la [Luna Luchen], fue golpeado por la [Esfera de Fuego], y salió volando. Su cuello estaba agrietado, se rompió y cayó al suelo, después dejó de moverse.

—Su nivel en si no es tan alto. ¿Sería el mismo rango que un monstruo de rango D? … No, puede haber sido un poco más bajo que eso. No quiero pensar en ello demasiado profundo, pero probablemente se deba al nivel que tuvo en vida hasta cierto punto. —Meltier-san se limpia el sudor de su frente mientras dice eso.

Al principio no entendía cuál era su intención, pero supongo que rápidamente juzgó que el monstruo tenía un cuello largo, por lo que me dio instrucciones de tirarle un escudo, con tal de que no pudiera proteger su punto débil satisfactoriamente.

Ella ha sido una aventurera por mucho más tiempo que yo. El hecho de que fuera capaz de comprobar el nivel aproximado del oponente al principio es un buen ejemplo, Meltier-san está acostumbrada a lidiar con los monstruos en frente de ella.

—Parece que este monstruo no tiene ninguna habilidad única. Mirando afuera, tampoco puedo ver que alguno de ellos este utilizando algo como eso. Sin embargo, como parece haber grandes diferencias individuales en el nivel y habilidades, no podemos ser tan optimistas. (Meltier)

Meltier-san se para enfrente de la puerta rota y mira a su alrededor.

—Deberíamos reunir a las personas en algún lugar donde haya comida. No podemos dejar que los supervivientes deambulen por ahí afuera, cuando no sabemos si la lluvia volverá a caer. Tampoco podemos dejar los cadáveres a la intemperie, por si la luz roja vuelve a aparecer. Debemos quemarlos con magia, enterrarlos, o llevarlos al edificio más cercano. Y si tenemos que enfrentarnos a un monstruo como ese, no tendremos suficiente poder mágico. La única manera de hacerlo es permaneciendo en el castillo, y hacer un cambio de guardia. —Meltier-san dijo rápidamente.

Creo que realmente quería ordenar sus pensamientos más que querer decírmelo. En esta situación desesperada, Meltier-san está tratando de mantener la calma.

Yo tampoco puedo simplemente dejarme llevar por la situación.

Sacudí mi cabeza tratando de ahuyentar el miedo, aunque fuera un poco.

—… Así es. No tenemos más remedio que esperar el regreso de la Santa Lilyxila y los Caballeros Sagrados. (Milia)

Para ser honestos, hay muy pocas esperanzas de que la Santa Lilyxila pueda competir contra Jornes. Sin embargo, no tengo más remedio que apostar a ello.

—No, inesperadamente, creo que, si logramos reunir las fuerzas suficientes, tal vez podamos derrotar a la Santa Jornes. (Meltier)

—Eh… —Dudé de lo que había dicho Meltier-san.

—Mira, Milia. Jornes, que es lo más importante de esto, lleva mucho tiempo flotando en el lugar donde estaba la cabeza del ángel. Si realmente tiene el poder, no tendría para que tomarse su tiempo dejándoselo a los monstruos, sino que ella misma podría ir y matarnos con sus propias manos. (Meltier)

—Eso puede ser, pero… (Milia)

—Ese ataque mágico era solo un farol. No, ciertamente esa lluvia era a gran escala, pero solo era una habilidad de muerte instantánea y que da la condición de estado maldición. Por lo que puedo ver, ni las paredes o el suelo están dañados. (Meltier)

De hecho, la lluvia parecía tener poco efecto en cualquier otra cosa que no fuera un ser vivo.

Por eso pude evitarla con mi [Escudo de Arcilla].

—Probablemente Jornes carece de un medio de ataque directo. Además, el hecho de que este en un lugar donde las personas no pueden acercase fácilmente demuestra que tiene miedo de ser atacada. El cuerpo principal de Jornes probablemente no sea tan robusto. Si reunimos las fuerzas y la atacamos, puede que no sea imposible derrotarla. No es que sea un dragón o un monstruo, es solo un ser humano. No importa cuánto poder mágico tenga, si podemos rodearla y atacarla, no debería ser imposible someterla. (Meltier)

—S-Sí… ¿Puede ser? Sin embargo, la magia con la que destruyó la cabeza de la estatua del ángel… (Milia)

—Eso ciertamente es una amenaza. No obstante, en comparación con esa lluvia, la escala del ataque sigue siendo suave. A pesar de la ausencia de los Caballeros Sagrados, los monjes guerreros del Reino Sagrado de Lidom son mucho más fuertes que la mayoría de los aventureros. No hay duda de que las probabilidades están en nuestra contra. Pero hay muchos monstruos de rango D en esta Ciudad Santa cerrada. Mientras más pase el tiempo, seremos nosotros los que nos quedaremos sin opciones. (Meltier)

Me puse al lado de Meltier-san y miré al cielo.

Jornes mira las calles de la Ciudad Santa con ojos fríos. Mientras tanto, puede hacer lo que quiera, como volver a dejar caer la lluvia negra, o desatar la magia arcoíris.

Qué tal si en vez de que no pueda hacerlo, sea que ¿simplemente no quiera hacerlo…? ¿Tiene miedo de perder su poder mágico?

Esa es una magia a gran escala. Como era de esperar, no creo que el consumo de poder mágico sea pequeño.

Después de todo, ¿se está preparando para la pelea contra la Santa Lilyxila? No, todavía siento como que será demasiado tiempo. Sin embargo, no creo que Jornes le tenga miedo a unos simples monjes, como dice Meltier-san.

¿Y si tiene una razón para tomarse su tiempo para destruir la Ciudad Santa de Lidom?

—… Es como si tratara de amenazar a alguien para que se apresure. (Milia)

—¿Dijiste algo? Milia. (Meltier)

—No… (Milia)

—Sé que estas nerviosa por enfrentarte a esa cosa. No voy a hacerlo sin un plan. Nos uniremos con las fuerzas restantes de la Ciudad Santa, construiremos una base… y, en el proceso, reuniremos suficiente información sobre Jornes, para comenzar de nuevo desde cero. (Meltier)

Rachidor: Aunque Meltier es bastante capaz al ser poder responder al ataque de uno de esos monstruos al instante y pensar en un plan a largo plazo, lamentablemente sus suposiciones están basadas en la mentalidad de un ser humano, cuando en realidad su oponente es un ser mas allá de eso.

Trad. ~Rachidor

Ed. ~Aucifer Sakuya

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