Ocultarle cosas a la familia es difícil
En respuesta a la interrogación de Ryuze, ladeé la cabeza con movimientos no refinados.
—Onii-sama, ¿de qué estás hablando? ¿No soy tu prima Britney?
—Sí, pero… hemos vivido juntos durante mucho tiempo, y después de haberte observado tanto he empezado a sentir algo incómodo. El abuelo siempre ha sido muy sobreprotector, así que solo yo he notado un cambio definitivo.
Al igual que yo he estado observando a Ryuze, parece que él también me ha estado observando.
—Jum. Espera…, ¿no será solo porque he perdido peso?
—Puede ser, pero es casi como si algo te hubiera poseído. En primer lugar, no puedo ver tu conducta como el de una joven noble de trece años.
—… La pubertad se presenta de muchas formas en las jóvenes.
Traté de esquivar las preguntas de Ryuze con una respuesta vaga, pero este primo mío no pensada dejarse engañar tan fácilmente.
—En primer lugar, ¿de dónde sacaste esos conocimientos? Por mucho que investigara no encontré libros que mencionen algo sobre jabón o aguas termales en nuestra biblioteca. Nunca has salido de casa, ¿cómo fue que conseguiste aprender todo eso?
Mi primo se me aproximó y puso ambas manos en la puerta para que no pudiera escapar.
—Eh, Britney. Si estás ocultado algo, dímelo con honestidad. Somos familia, ¿no?
—Gu-gufufu… Es solo un salto a la adultez común y corriente. Con respecto a las aguas termales…, pues…, me enteré de ellas por un comerciante que llegó a nuestra finca. El jabón fue algo que produje por accidente.
—No me estás mirando a los ojos, sino que volteas hacia la izquierda. Qué triste me pones; todavía me mientes.
—¿Eh…?
Parece que algo que leí en un libro de psicología en mi vida pasada era cierto.
Si la otra parte miraba levantaba la mirada hacia la izquierda, está diciendo una mentira, y si la levantaba hacia la derecha, está diciendo la verdad. A propósito, si baja la mirada hacia la izquierda, significa que están tratando de recordar emociones pasadas, y si la bajan hacia la derecha, significa que se están preguntando algo a sí mismos. (TI: Ni idea si algo de esto sea verdad. ¿Alguien sabe algo?) (NT: Yo sí. Y más o menos esa es la teoría, dado que son reacciones naturales del cuerpo estudiadas ya hace tiempo. Son detalles que se pueden controlar en cierta medida, creo recordar)
Aunque el mundo de este manga shoujo está tecnológicamente atrasado en comparación con mi mundo anterior, me preocupa que la psicología pro sí sola haya crecido hasta este nivel.
—No tienes por qué ponerte tan cautelosa.
Más bien creo que es bastante razonable ser cauteloso en esta situación.
Por el momento, necesito hacer algo respecto a este arrinconamiento. No creo que se tenga un significado más profundo, pero es malo para mi corazón.
—¿Qué puedo decir para que me creas?
—Dime la verdad.
—… ¿Y si la verdad es una historia absurda?
—Aún si fuera el caso, quiero saber de ti.
Me tomé un momento para pensarlo.
«Si quiero escapar de esta situación, ¿debería que decir la verdad? Es una historia que nadie creería, de todos modos». (TI: Britney, no; ¡eso es como enseñarle tu punto débil al jefe final!) (NT: Nah, seguro estará bien)
Aún si mis ojos llegasen a confesar la veracidad de la historia, creo que de igual manera Ryuze probablemente no la creerá.
Habiendo dominado mi actual expresión, volví la mirada hacia mi primo y lentamente entoné mis palabras.
—Onii-sama, ¿crees en las vidas pasadas?
—… ¿Cómo?
—Tengo recuerdos de mi vida como un ser humano distinto. Recordé todo eso precisamente el día en que se rompió mi compromiso.
Ryuze me miró en silencio a la cara.
«Supongo que estará confirmando si es una mentira o no».
—En el mundo de mi vida pasada, el nivel de la civilización era mucho más avanzado. El jabón que creé era abundante en aquel lugar… Los otros productos también; todo lo hice usando los conocimientos de mi otra vida. Bueno, los ingredientes necesarios no estaban todos presentes, así que no pude hacer exactamente los mismos productos.
—…
—Mi edad en esa vida anterior era un poco mayor de tú ahora mismo, Ryuze-oniisama, así que creo por eso fue que te sentías incómodo… ¿Crees en lo que te estoy diciendo?
—Britney.
—Qué va. Después de oír las palabras de Onii-sama, mis ojos se han mantenido mirando hacia la derecha mientras te contaba semejante cuento fantástico.
Luego de decir eso rápidamente, escapé por un hueco entre los brazos de mi primo.
«Bien, ¡escapé!».
O eso creía, pero al segundo mi muñeca fue perfectamente atrapada. No había logrado escapar.
—No sé si la historia de tu vida anterior sea cierta o no…, pero ahora estoy muy interesado en ti.
Con ojos tan azules como un océano, Ryuze me miró fijamente.
—Está bien incluso si no estás interesado en absoluto. A fin de cuentas, soy solo una cerda blanca.
—Me pareció inusual que hablaras tan impíamente sobre la princesa Angela… Me pregunté en qué estabas pensado.
—¿Hablas en serio? Por favor, rechaza rotundamente cualquier cosa que implique ese asunto de dirigirse a la capital real. Necesito adelgazar y crear buenas vibras para poder encontrar un cónyuge… Aunque no he logrado perder peso más allá de los 60 kilos…
—¿No ayudaría dejar de comer bocadillos en la medianoche?
—… ¿En la medianoche? ¿De qué estás hablando?
—Ocasionalmente sales en medio de la noche a hurgar en la cocina en busca de comida, ¿o no?
—… ¿Eh? No puede ser… No me lo creo.
Ofensas pasadas cruzaron por mi mente.
En el momento en que empecé mi dieta, a veces caminaba dormida y me encontraba en la cocina.
Me desperté en aquellas ocasiones, pero si de casualidad comiera y volvía a la cama sin darme cuenta… Qué horror.
«¡Necesito tomar contramedidas lo antes posible…!».
Esta vez pude sacarme de encima a Ryuze, y me eché a correr a toda velocidad hacia mi habitación.
Me pareció oírle reírse detrás de mí, pero tuve la sensación de que no debería mirar atrás…
Según recuerdo es un método común en la psicólogia, pero dependiendo de la persona puede ser inútil.
(Es parte de las micro expresiónes).
🤔
Tiene mucho que ya no tengo clases de psicología, así que mi información es algo confusa
Yo aprendí algo de eso de parte de mi papá (quien no es ningún psicólogo, pero suele leer un poco de todo); la verdad es que me había olvidado de ello hasta ahora.