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El pasado de la cerda villana
En esta vida, no tengo padres. El cabeza de familia, conde Hakusu, mi padre, se había fugado con la esposa de otro hombre. Todo lo que ocurrió después de eso era un misterio. Sintiéndose insultada, mi madre cortó todo lazo con la familia del conde, regresó a su hogar y se volvió a casar con otro noble. Esto fue posible porque su familia estaba más arriba que la del conde.
El mundo de este manga shoujo le da más importancia a la practicidad que al amor cuando se trata de matrimonios. Pero, con los cambios de cada era, el matrimonio por amor iba en auge. Aunque tenía sus similitudes a como fue Europa en el pasado, no todo era igual. Era el mundo de fantasía en un manga shoujo, después de todo: con la fe puesta en nuestra heroína, Merrill, quien seguramente se casaría por amor al final.
El que actualmente dirige la familia Hakusu es mi abuelo, Sarusu Hakusu. Mi abuela falleció hace ya un tiempo.
Siendo el buen tipo que es, mi abuelo a veces resultaba no ser muy confiable: siendo estafado con frecuencia, tropezándose con deudas de otras personas y siendo presionado a comprar bienes extravagantes. Como persona, es un abuelo muy agradable y guay, pero, como cabeza, era bastante inadecuado. Nos vemos comprometidos financieramente gracias a él.
Mi compromiso, aunque anulado, había sido, por supuesto, de índole política. Ese lado quería sosegar su influencia como gobernantes y nosotros íbamos por el apoyo financiero. Por cierto, estaba planeado que mi primo se haría cargo de la casa Hakusu, así no habría preocupaciones por un heredero. La compensación por esta anulación fue un monto discreto. Mejor hubiese sido para la casa Hakusu que sí me casara, pero no se hacer nada si el otro lado había rechazado. Puedo imaginar la razón de la anulación: el hijo del otro lado probablemente vio la figura de Britney y se volvió seriamente reacio. No nos hemos conocido en persona, pero es bien sabido lo gorda que era Britney y su mala personalidad.
Habiendo recibido la noticia a través de mi abuelo, miré mi reflejo en un gran espejo. La figura de Britney era… lo suficientemente mala como para hacer que incluso yo quisiera anular cualquier compromiso si estuviera en los zapatos del otro. Estamos hablando de un peso superior a los 80 kilos teniendo solo 12 años. Un rostro que se extendía hasta el cuello, un fuerte olor corporal; el papel perfecto para irritar los ojos de otras personas. El hecho de que el abuelo me mimara constantemente provocó, además de todo lo anterior, la creación de una personalidad autorientada que no sabía ver el mundo. Con pasatiempos tales como comer y tomar el té de la tarde, gastar en vestidos nuevos y acosas a los sirvientes… una niña de lo más problemática.
Vivir de ese modo como una rutina diaria antes de haber recordado todo me llevó a una profunda depresión. Pero, esto no ayudará, nada de eso iba a mejorar, es algo que ya pasó y, por lo tanto, ya es demasiado tarde…
Se me ocurrió hacer algo:
Sorprenderse con la anulación del compromiso → Hacer un viaje para buscarse a sí mismo → Abrirse y comenzar un nuevo camino.
Lamentablemente, no existe tal opción. Esta gordita que no sabe nada del mundo está destinada a perderse, o bien ser atrapada por un tío sospechoso para más tarde ser vendida. Y no solo eso, la yo que aún le faltaba hacer su debut no posee habilidad alguna. Britney era lo ordinario fuera de lo ordinario y, dependiendo del caso, una grasa triste con menos capacidad en comparación con lo ordinario. Y…, como hija de los Hakusu, no tengo las agallas para desechar la responsabilidad. Los nobles son en realidad personas que tenían gran importancia en sus papeles.
Se volvió claro que mi plan sería perder peso para no atraer a la hermana de Merrill. Como una dama normal de la familia del conde, viviré una segunda vida normal. Ese era mi objetivo.